El 9 de diciembre de 1824 se libró la Batalla de Ayacucho en la Pampa de Quinua en Ayacucho, Perú. Este último gran enfrentamiento dentro de las campañas terrestres de las guerras de independencia hispanoamericanas (1809-1826) significó el final definitivo del dominio administrativo virreinal hispánico en América del Sur.
En esta batalla, que dio fin a la Guerra de la Independencia, participó el Ejército Unido Libertador del Perú, al mando de Antonio José de Sucre contra las tropas del virrey La Serna.
Pero esta no fue solo una pelea entre españoles y criollos: miles de indígenas de Pomacocha, Vilcas Huamán, Carhuanca, Huancaray, Andahuaylas y más aportaron a Bolívar, señala el historiador huamanguino David Quichua. Basilio Auqui, líder morochuco, es símbolo de estas luchas previas.
Al finalizar la batalla, el líder en funciones José Canterac firmó la capitulación de Ayacucho dando fin a la Guerra de la Independencia del Perú. En España, el acto sería visto como una conspiración contra la corona.
Consecuencias
Las principales consecuencias de la batalla de Ayacucho fueron las siguientes:
- La rendición del ejército realista y la captura del virrey José de la Serna, el cual fue dispuesto como prisionero.
- Se firmó la capitulación de Ayacucho, que dio lugar a la Independencia del Perú y puso un fin al virreinato del Perú.
- Luego de la manifestación deL pueblo de no unirse al Congreso de Perú ni a las Provincias Unidas de Río de la Plata, se dio lugar a la reorganización del Alto Perú. Esto dio lugar al nacimiento de la República Bolívar o Bolivia, la cual rendía honores a Simón Bolívar como padre de la patria.