“Estoy pensando en denunciar a la universidad Cayetano Heredia y al Estado Peruano. Nos están tratando como cualquier cosa”, apuntó Irina Burgos
Irina Burgos Chorres, voluntaria de la vacuna de Sinopharm en Perú denunció malos tratos por parte de la Universidad Cayetano Heredia hacia los participantes de los ensayos clínicos.
En diálogo con Exitosa, Irina Burgos manifestó que se encuentra indignada y sumamente molesta, e incluso señaló que hay voluntarios que quieren organizar marchas.
“Estoy pensando en denunciar a la universidad Cayetano Heredia y al Estado Peruano. Nos están tratando como cualquier cosa. Hay voluntarios que quieren pronunciarse; hablan de organizar marchas, pero me parece que esto sería incoherente”, expresó.
Asimismo, criticó el escándalo del VacunaGate y señaló que pese a ser voluntarios fueron los últimos en ser considerados.
“Lo que concierne al ensayo en sí y al escándalo del vacunaGate, los últimos en ser considerados fuimos los voluntarios, aun cuando somos un parte medular de este estudio. Es indignante, estoy furiosa por la forma en como la universidad Cayetano Heredia nos está tratando”, indicó.
Además, agregó que los ciegos (en donde se confirma quien recibió la vacuna y quien recibió placebo) ya tendrían que haber sido abiertos. “Dicen que están esperando autorización del INS, pero dicen eso hace tiempo”, manifestó
Finalmente, señaló que, ante tantas faltas éticas, lo más seguro es que ninguna institución científica quiera recibir el artículo sobre el resultado del ensayo.
“No me arrepiento de haber participado en el ensayo. Quise colaborar, estuve convencida y confiada en la ciencia. Sobre todo, confié en una institución como la UPCH. Lamentablemente, la corrupción no solamente está en los candidatos presidenciales, sino también se cierne a una bata blanca y un laboratorio”, finalizó.