El “rey de los gallos” fue hallado con las manos y pies atados
El cuerpo sin vida del empresario Julio César Aguirre Alegría (42) fue descubierto por sus familiares cuando acudieron a buscarlo en el cuarto piso de la vivienda multifamiliar ubicada en la manzana C, en la urbanización Villa Santa Anita debido a que se encontraba desaparecido.
La Policía llegó a la vivienda y halló a Aguirre en posición decúbito dorsal con las manos y los pies amarrados con cinta de embalaje y la cabeza también estaba cubierta con este mismo material. Así también, los ambientes de su departamento estaban revoloteados y le faltaban su colección de relojes, alhajas de oro y dinero en efectivo, todo por un valor de US$70 mil.
Según las investigaciones, informaron que, el empresario llegó a su casa acompañada de una ciudadana extranjera. Pero después, la mujer hace ingresar a sus dos compatriotas.
Luego, los tres extranjeros salen de la casa, abren el carro de la víctima y se apoderan de un arma de fuego y se retiran.
La Policía presume que el crimen habría sido planeado por la extranjera que, al parecer, lo pepeó (drogó), lo redujo y junto a sus cómplices lo habrían asfixiado. Un amigo del hombre de negocios declaró que una venezolana, amiga de Aguirre, le presentó a esta extranjera que sería la autora intelectual del homicidio.
Julio César Aguirre tenía varios restaurantes y también era gerente de Gallocentro Pluma de Ángel y participó en diferentes competencias.