Por Juan Sotomayor
Hace algunos días, el Jurado Nacional de Elecciones (JNE) informó que ha revisado más de 1400 expedientes de apelación provenientes de los 94 Jurados Electorales Especiales (JEE), relacionados a las inscripciones de listas de candidatos para las elecciones regionales y municipales del próximo 7 de octubre. Habiéndose resuelto más del 80% de los casos según el propio JNE, todavía queda un significativo número de resoluciones pendientes de emitir en los próximos días, las mismas que serán cruciales para las agrupaciones y candidatos interesados en cada caso particular.
Con más de 14,000 listas recibidas, que incluyen a 113,564 postulantes a cargos regionales y municipales, la tarea del JNE es ardua y muy delicada; más aún teniendo en cuenta que todo proceso electoral suele exaltar los ánimos, especialmente cuando se presentan controversias como las tachas de candidatos. No es secreto que muchos de estos procedimientos pretenden sustentarse en argumentos subjetivos o falaces que buscan derribar como sea a los rivales políticos, incluso aun pretendiendo poner por encima de la voluntad popular y de los procesos de democracia interna, formalismos que la ley no exige e interpretaciones que tampoco ampara.
Ante ello, la transparencia, equidad y justicia son las mejores respuestas que todos esperamos. Sin duda, un punto a favor de estos principios, lo vemos en el hecho que prácticamente toda la información relativa al proceso electoral se encuentra al alcance de los ciudadanos en la plataforma implementada por el JNE especialmente para este proceso. Incluso las audiencias públicas en las que se ventilan las apelaciones, son transmitidas en vivo a través del canal JNETV y via streaming por facebook, avances que antes eran impensables y que hoy refuerzan la credibilidad en el proceso.
Por todo ello, debemos tener plena confianza en que el Jurado Nacional de Elecciones actuará con la mayor transparencia posible, resolviendo conforme a derecho, con criterios de imparcialidad, equidad y justicia todos los casos que son puestos en su conocimiento. Siendo así, no cabe duda que las próximas elecciones regionales y municipales serán una verdadera fiesta democrática y en ella se respetará a plenitud la voluntad popular en todo el país.