JORGE B. HUGO ÁLVAREZ
Aquella memorable frase del exsecretario de Estado de los EEUU, Henry Kissinger, no les resultan ajenas a los gobernantes de los Estados Unidos, Europa, Rusia y China Continental. Porque la dependencia de Europa en relación del gas ruso, supera el más del 50% que comprende a catorce países europeos.
Eso, los hace repensar que sus intereses están más cerca a Rusia que a los Estados de Norteamérica. Pues, la dependencia energética se ha constituido en un arma política poderosa, que ha doblegado a Gobiernos de Alemania e Italia, pues, ellos no podrían sobrevivir sin los hidrocarburos de la Federación Rusa.
Por su lado América del Sur, en un contexto tan dramática para sus economías nacionales, les resulta un absurdo no haber desarrollado su seguridad alimentaria, gozando de tantos recursos naturales.
Pues la guerra: Rusia-Ucrania-OTAN-EE.UU., exacerba la escalada de precio de los alimentos, que ponen en riesgo la estabilidad de sus gobiernos, por la hambruna, turbulencias político-sociales, flujos migratorios y tensiones geopolíticas. La dependencia nos hace débiles, la interdependencia, coja y la autosuficiencia, fuertes.
Entonces, no hay mayor lección para los pueblos al Sur de América, lo que ocurre con el Gobierno de Guillermo Lasso en Ecuador. Ajeno, esa insensibilidad humana, Perú debería optar por el pragmatismo y, ese pragmatismo, nos indicaría que debemos negociar, la compra del gas boliviano y el Petróleo de Venezuela.
Si el archienemigo de la República de Venezuela, el Gobierno de Joe Biden negocia con Nicolás Maduro la compra de Petróleo por qué el Perú, ¿no debería negociar en buenos términos con Bolivia y Venezuela?
Pues, Bolivia, después de la caída de su producción de gas, el Gobierno anunció para felicidad de sus connacionales, el éxito de la perforación de un nuevo pozo de gas natural (Margarita 10) con un potencial de 300 a 350 billones de pies cúbicos, lo suficiente para cumplir con sus exportaciones a Brasil y Argentina y, desde luego, podría ser el caso del Perú.
Curiosamente nosotros exportamos gas, luego importamos lo que exportamos a precios dolarizados. Ironía de la vida que una Nación rica en recursos naturales, sea pobre en recursos con valor agregado. Entonces, Tongo tenía razón al clamar al cielo: ¡Oh, mi Dios, cómo morir de sed, teniendo tanta agua o tal vez morir de frío, teniendo tanto gas natural¡
¡Pues mortal, dejad que el dueño de esa riqueza viva de lo suyo y disfrute de ella con dignidad! A lo que la Empresa concesionaria le respondió: ¡Negocios, son negocios , mortal Tongo. Recordad que Jalisco nunca pierde ¡Pues tu gobernante recibió la suya y, yo la mía. Pues, lo demás son sueños de opio, regordete ¡.
Perú, puede constituirse en la despensa alimentaria para el mundo y para su propio pueblo. Gozamos de todos los climas, de amplias tierras, abundante agua, un mar de Grau inmenso y rico en productos marinos, gas, entre otros recursos. Entonces, necesitamos peruanizar a los peruanos.
(*) Abogado penalista y analista político.