Actualmente se registra más de 200 conflictos sociales en todo el país, según la Defensoría del Pueblo.
Un total de 207 conflictos sociales se han registrado a la fecha, según el reporte n.° 220 de la Defensoría del Pueblo. Esto pone en riesgo la actividad económica del Perú. Además, de esta cantidad de conflictos, 153 se encuentran activos y 54 son latentes.
En ese sentido, la Defensoría del Pueblo refirió que seis conflictos son nuevos y se presentan en regiones como Amazonas, Apurímac, Moquegua, entre otros.
Más disputas
En tanto, el ente señaló que entre los nuevos conflictos sociales registrados esta el que ocurre en Amazonas. Aquí hay una disputa entre la ciudadanía y las organizaciones sociales de Condorcanqui. Además, la población exige un cambio de la dirección de la Unidad de Gestión Educativa Local al gobierno regional. Por último, buscan que se atienda debidamente la problemática de la educación intercultural bilingüe.
Siguiendo con el listado, existe otro conflicto en Lima, entre el Frente de Defensa de Canta y un sector de la población. Los ciudadanos exigen que se atienda el problema de contaminación que dejó el derrame de 35 toneladas de concentrada de zinc al río Chillón.
Por otro lado, en Challhuahuacho, Apurímac, diversas comunidades campesinas de Chuicuni y Chila se encuentran en conflicto con la empresa minera Las Bambas. La población señala que la compañía no ha cumplido con los compromisos previos. Por este motivo, solicitan formar parte del área de influencia directa de la propia minera. Además, en el caso de Chila también piden la renegociación del precio por la transferencia de parte de su propiedad.
En cuanto a Moquegua, la Defensoría del Pueblo ha registrado un conflicto socioambiental, siendo el quinto de esta lista. En la provincia General Sánchez Cerro, la Asociación de Comunidades Campesinas originarias piden la paralización del Proyecto Minero San Gabriel.
Por último, el sexto conflicto se produce entre la comunidad nativa de Huascayacu de la región San Martín. Aquí el motivo del conflicto es la negativa a la creación de una base de rondas campesinas promovidas por los arrendatarios del sector Sugkash.