La sequía ha golpeado la agricultura, la ganadería y el acceso al agua potable en 21 de las 34 provincias afganas, sobre todo en el norte y el oeste del país
Al menos 3,3 millones de afganos, en su mayoría afectados por la guerra y los desastres naturales, están en riesgo de sufrir hambruna en el país y necesitan ayuda humanitaria urgente, casi el doble que hace un año, informó hoy la ONU.
«El número de personas en riesgo de hambruna casi se ha doblado en el último año hasta los 3,3 millones», indicó el portavoz de la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de Naciones Unidas (OCHA) en Afganistán, Philippe Kropf.
Estas personas viven en la «fase de emergencia» o cuarto nivel del Índice de Seguridad Alimentaria, lo que supone que al menos una de cada cinco familias en la zona sufren malnutrición muy severa y exceso de mortalidad, detalló Kropf.
Otros 8,3 millones de afganos viven en situación de «crisis» o fase tercera, con malnutrición por encima de los límites frecuentes, como señala un informe de la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura ( FAO) que todavía no ha sido difundido públicamente.