Fueron vecinos y no policías los que la auxiliaron
Entre la vida y la muerte se debate, Marta Flores Fierro, impactada por una bala pérdida durante el tiroteo entablado por policías con hampones y que permitió liberar de un secuestro a una madre de familia, que había sido tomada por la fuerza luego de haber dejado a sus hijos en un colegio de Los Olivos.
La mujer de 54 años había salido a comprar pan y recibió un impacto de bala en el tiroteo entre la Policía y delincuentes en Los Olivos a pocos metros de su casa, en la calle Antonio Raymondi, y fueron los vecinos –y no la policía, los que la condujeron a la Clínica del Norte, del citado distrito.
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Su hija Mariella se quejó amargamente del comportamiento policial. “Mi madre salió a las 8 a comprar para la casa y en eso, a dos cuadras, ha habido un tiroteo de los policías. Nos tocaron la puerta y la encontré a mi madre en el suelo, botada. La traje lo más rápido posible (con ayuda de vecinos) a la clínica”, dijo.
Su hija, Mariela, se encuentra en la Clínica del Norte esperando a la evolución de la salud de su madre y contó que, producto del impacto de la bala, tres órganos de su madre se han visto comprometidos.
¿Quién me la devuelve?
“Nos han dicho que no hay muchas expectativas porque ha perdido demasiada sangre», dijo Mariela.
Mariela cuestionó que no haya protección a los ciudadanos cuando ocurren estos hechos en las calles de Lima. Agregó que solo un policía se acercó a la clínica. «¿Quién me va a devolver a mi madre si fallece? No tenemos voluntad de ir a una comisaría, estamos pendientes de mi madre», añadió.
