Lo abandonaron en un cañaveral
El empresario Iván Díaz Garrido (57) que estaba cautivo en manos de secuestradores desde hace 11 días, fue abandonado por sus captores en unos cañaverales de la azucarera Cartavio, en el distrito de Laredo (Trujillo), con señales de haber sido objeto de torturas y sufrido la amputación de 3 dedos, para obligar a su familia a que paguen un rescate.
El general PNP, Francisco Vargas Andonaire, jefe de la III Macro región Policial, informó que el empresario fue encontrado abandonado por agentes de la comisaría de Laredo, abandonado en un descampado, cuando realizaban patrullaje con efectivos de la Dirección Nacional de Operaciones Especiales (Dinoes).
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Los policías constataron que se hallaba en estado comatoso, por haber sido objeto de torturas, entre ellas el cercenamiento de tres dedos y quemaduras en el rostro.
“Desde un principio la Policía manejaba la hipótesis que estaba en el distrito de Alto Trujillo, en un lugar Río Verde, la policía puso en acción un dron, por eso los delincuentes al sentir la presión se han trasladado a Laredo, donde lo han soltado”, afirmó.
El empresario Díaz Garrido fue secuestrado el lunes 23 de octubre en su local empresarial por unos delincuentes disfrazados de policías, y en las horas siguientes pedían un rescate de 500 mil dólares, luego se bajaron a 250 mil dólares y finalmente solicitaron 100 mil dólares.
Banda Los Pulpos
Sus familiares aseguraron a la Policía Nacional que no pagaron nada por su rescate, debido a que los negocios del empresario carecían de la liquidez por ese cuantioso momento, según reportó el general Francisco Vargas.
Según la Policía, detrás del secuestro estaría la organización criminal Los Pulpos, cuyos integrantes son objeto de intensa búsqueda policial.