La piel es el órgano más extenso de nuestro cuerpo y, por razones que son obvias, también es uno de los más importantes.
Actúa como barrera protectora del organismo interno ante el medio que lo rodea y, a su vez, desempeña un papel principal en algunos procesos vitales.
Sin embargo, dado que está expuesta de forma directa a las toxinas y los rayos del sol, tiende a sufrir algunas agresiones que, con el tiempo, pueden conducir a graves problemas de salud.
Si bien a través de sus poros se pueden obtener algunos beneficios de la luz solar, la exposición prolongada a estas ondas genera quemaduras, imperfecciones y algunas enfermedades.
Esto se debe a que ocasionan muerte en el tejido celular, de modo que afectan su actividad y aceleran su proceso de envejecimiento.
Además, en casos más graves inflaman los tejidos e incrementan el riesgo de desarrollar melanoma o cáncer.
Por eso, es fundamental tomar medidas preventivas, usar protector solar todos los días y aumentar la ingesta de los alimentos que minimizan estos efectos.
A continuación queremos destacar los mejores alimentos que protegen nuestra piel.
LAS BAYAS Y LOS FRUTOS ROJOS
Son pequeñas frutas con altos niveles de vitamina C, un antioxidante que inhibe los daños de los radicales libres causados por la exposición continua al sol.
ZANAHORIAS
Son un alimento conocido en cuanto al cuidado de la piel, ya que es una fuente principal de beta-caroteno, un antioxidante que se sintetiza en vitamina A dentro del cuerpo.
Este nutriente esencial es clave para la reparación de los tejidos celulares, ya que fortalece la dermis y reduce el impacto negativo del sol.
De hecho, actúa como filtro natural. Así, nos permite tomar baños de sol cortos sin riesgo de padecer alteraciones.
PESCADO AZUL
Es una fuente máxima de ácidos grasos omega 3, un tipo de aceite saludable que aumenta la permeabilidad de las membranas para conseguir un óptimo funcionamiento celular.
Su ingesta promueve la desinflamación de los tejidos, a la vez que reduce los efectos de los radicales libres y el sol.
Esto, sumado a su aporte de vitamina E, acelera el proceso de reparación de la piel, sobre todo en caso de quemaduras y manchas.
Algunas variedades recomendadas son:
Sardinas.
Salmón.
Caballa.
Anchoas.
VEGETALES DE HOJAS VERDES
Contienen poderosos antioxidantes que se han relacionado con la prevención del cáncer de piel y las arrugas.
Su contenido de beta-caroteno, sumado a su ácido fólico y vitamina E, mejora la actividad celular y crea una capa protectora contra los rayos UV del sol.
Las más destacadas son:
Espinacas
Col rizada.
Acelgas.
Brócoli.
Lechuga.
Apio.
Perejil.