Aún se desconoce los responsables y el motivo en concreto tras el atentado
La noticia del asesinato y encineramiento de tres carabineros en Cañete, La Araucanía, ha conmocionado a Chile. Los agentes, identificados como el sargento Carlos Cisterna Navarro y los cabos Sergio Arévalo Lobos y Misael Vidal Cid, fueron atacados por un grupo de criminales mientras se encontraban en su patrulla.
El presidente Gabriel Boric anunció un duelo nacional de tres días y su viaje a la zona del atentado. En una reunión de emergencia con autoridades, coordinaron acciones inmediatas para abordar la situación. Boric aseguró que no habrá impunidad y que se dará con el paradero de los responsables.
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La celebración del aniversario de la institución policial fue suspendida, y el director general de Carabineros, Ricardo Yáñez, expresó su indignación por el cruel acto.
“Esto no fue casual, no fue al azar. Basta ya y hasta cuándo. Lo único que hacemos es luchar por la seguridad de nuestros compatriotas”, enfatizó.
Además, la ministra del Interior, Carolina Tohá, también condenó la brutalidad del crimen, describiéndolo como un nivel sin precedentes de crueldad y alevosía.
Este crimen se suma a una serie de episodios de violencia en la macrozona sur de Chile, donde se han reportado ataques incendiarios, asaltos armados y conflictos territoriales entre comunidades mapuches, el Gobierno y grandes empresas.
