Fiscal José Domingo Pérez admite que tuvo información de que líder aprista podría atentar contra su vida
Dos meses antes de su muerte (febrero de 2019), el ex presidente Alan García denunció que había sido chuponeado por la Policía días después de que el gobierno de Uruguay se negara a asilarlo en su embajada de Lima.
Los reflectores alumbraron los airados reclamos que el ex mandatario descargaba desde su casa de Miraflores. Y es que García, aquella vez en la calle Manuel de Freyre Santander, aseguraba que una camioneta de la Policía Nacional se ubicó en las inmediaciones de su vivienda para interceptar sus comunicaciones telefónicas.
Su denuncia motivó que la fiscal Janet Bernal abriera una investigación preliminar para establecer si hubo alguna irregularidad. Incluso provocó que el ministro del Interior, Carlos Morán, sea citado al día siguiente a la Comisión de Defensa del Congreso –presidida por el aprista Jorge del Castillo– para que respondiera por la presencia de efectivos del orden en el lugar.
Morán aclaró que el vehículo no servía para chuponear, sino para hacer monitoreos ante una posible manifestación ciudadana, como las que ya se habían registrado tras el intento de asilo de García.
La fiscal Bernal dispuso que se realice un peritaje a la camioneta policial para aclarar si existió chuponeo. Y en solo un mes y medio emitieron un informe señalando que los 15 equipos analizados “corresponden a un sistema de monitoreo que permite la transmisión de señales audiovisuales en alta calidad”. El reporte agrega que “no se evidencia su funcionamiento para realizar interceptación telefónica y/o registro de escuchas grabadas”.
El informe precisa también que sigue en análisis el disco duro que fue extraído del transmisor de video TVU MLINK. Este disco duro es el que -según el exjefe de Estado- guardaba “12 horas de grabación” del supuesto chuponeo.
En la misma situación se encuentran dos laptops (una marca HP y la otra Toshiba), un dron y su respectivo mando de control, y una memoria externa micro SD. Este tema no fue cerrado, sin embargo, quedó paralizado tras la muerte del expresidente.
Confesión de parte
El fiscal e integrante del Equipo Especial Lava Jato, José Domingo Pérez, se pronunció sobre la trágica muerte del expresidente de Perú, Alan García, que tuvo lugar en el año 2019, en medio de un cuestionado operativo que buscaba arrestarlo preliminarmente.
En una entrevista para el portal LP – Pasión por el Derecho, Domingo Pérez dijo que el Ministerio Público y la Policía Nacional (PNP) no tuvieron responsabilidad en el lamentable hecho. Además, señaló que dentro del entorno del exmandatario se supo que él podría atentar contra sí mismo. ¿Cómo tenía acceso a esa información de los familiares?
«Fue una situación en la cual ni Policía ni Fiscalía puede señalárseles como responsables de la decisión que tomó el expresidente (…)», sostuvo Domingo Pérez.
«Podemos constatar que no solamente el señor García en su libro ‘Metamemorias’, sino también en su círculo familiar, ya había anunciado que tomaría una acción grave y que, luego de ese fatídico hecho, confirmaron que había planificado su suicidio en caso la justicia llegara a él», remarcó. ¿Cómo tuvo acceso a información brindada por García a su círculo más cercano?
El pasado 17 de abril se cumplieron 5 años del fallecimiento de Alan García, quien gobernó Perú en dos períodos (1985-1990 y 2006-2011). A la fecha se ha presentado en el Congreso una moción para investigar la muerte del expresidente y el cerco judicial revelado por el colaborador eficaz Jaime Villanueva, donde están implicados José Domingo Pérez, Rafael Vela y Gustavo Gorriti de la ONG IDL.