El proyecto esta previsto para 2037, y generará ingresos fiscales, nuevos puestos de trabajo y más visitas en el sector turístico
Partiendo del concepto de planificación urbana de la ciudad de 15 minutos, los residentes de Ellinikon podrán acceder a escuelas, parques, oficinas, tiendas e incluso a la playa en menos de un cuarto de hora. Se instalará un sistema de software para supervisar los servicios de residuos, agua y energía en todo el complejo. Sus inversionistas la han autodenominado como «La ciudad inteligente».
Distribuida en 6200 acres (2509 hectáreas) el proyecto Ellinikon transformará tanto la costa griega como el país en si. Es el tipo de proyecto que normalmente se ve en China o los Emiratos Árabes Unidos, y una señal de la reactivación de Grecia después de la crisis y del posterior entusiasmo de los inversores. Sus promotores proyectan que añadirá 2,5 puntos porcentuales al PIB de Grecia, creará hasta 80.000 nuevos puestos de trabajo y generará ingresos fiscales de más de 10.000 millones de euros (10.772 millones de dólares) una vez finalizado se espera que también atraiga a un buen número de turistas.
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Ya se han puesto a la venta 243 unidades en el barrio denominado Little Atenas, y se han reservado 140. Los apartamentos, villas y condominios frente al mar de Marina Tower se agotaron primero, y Lamda Development anunció a principios de este mes que los ingresos por la venta de propiedades ascendieron a 641 millones de euros (690 millones de dólares) hasta el marzo pasado. La mayoría de los compradores son ciudadanos griegos y se espera que la ciudad albergue hasta 20.000 personas en unas 10.000 residencias en los próximos 13 años.
El proceso de hacer despegar a Ellinikon no ha sido sencillo. Cuando la compañía Lamda Development compró el terreno en 2014, algunas partes estaban llenas de ruinas del antiguo aeropuerto, incluidos aviones abandonados, mientras que otras albergaban a refugiados e inmigrantes indocumentados. La playa estaba salpicada de locales de ocio nocturno e instalaciones deportivas olvidadas hacía mucho tiempo. Los retrasos en el proceso de obtención de permisos alargaron aún más las cosas, y el hecho de que Grecia estaba en quiebra cuando se propuso el proyecto hizo que pareciera aún más improbable que alguna vez despegara. Pero ahora las cosas empiezan a acomodarse y el proyecto ve al fin la luz.
A finales del verano, siete nuevos edificios de condominios serán visibles desde la costa, junto al rascacielos en construcción. A finales de año, ese rascacielos habrá alcanzado los 100 metros (330 pies) y el número de edificios residenciales en construcción junto al mar habrá aumentado a 15. A finales de 2025, un polideportivo con campos de fútbol, canchas de tenis y las piscinas se abrirán al público.
