El hallazgo se produjo en Turquía, y a conmocionado a los arqueólogos por su inminente representación
El lugar donde se ha producido el descubrimiento es en Karahan Tepe y es uno de los yacimientos arqueológicos más importantes del mundo, ubicado en la región de Taş Tepeler, a unos 35 kilómetros de un templo mesolítico que data del año 9400 a.C. Este lugar prehistórico ha sido de vital importancia para la reconstrucción y comprensión de las antiguas sociedades en nuestra actualidad.
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Entre los descubrimientos más destacados se encuentra la estatua de un hombre que sujeta lo que vendría hacer su aparato reproductor masculina con ambas manos, indicando las importantes interpretación de los rituales y creencias de la época. La imagen presenta una serie de características distintivas junto con una expresión facial realista, un cuello en V y nervaduras meticulosamente talladas, los expertos han estimado que podría tener hasta 11.400 años de antigüedad. Para Ted Banning, antropólogo de la Universidad de Toronto, la posición del hombre en la estatua podría simbolizar a un progenitor de un linaje o clan asociado a la cultura.
A comparación del descubrimiento del Hombre Urfa, encontrado en el sureste de Turquía en 1993 y de unos 10.300 años de antigüedad, los ojos de esta nueva estatua no son de obsidiana negra, estos nuevos pares de ojos fueron tallados minuciosamente en la piedra. Además, la estatua de Karahan Tepe presenta barba y cabello, diferenciándose de su contraparte calva.
En el mismo nicho también se encontraron esculturas con formas de animales como serpientes, insectos, pájaros, un conejo y una gacela. Estas representaciones de la fauna prehistórica proporcionan valiosa percepción sobre la historia natural de la región. Si nos ubicamos en el tiempo y el espacio Karahan Tepe se encuentra a pasos Göbekli Tepe un templo mesolítico conocido más antiguo, datado en el año 9600 a.C. Este sitio, fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 2018, y ha sido fundamental en la reconstrucción de las teorías sobre las sociedades antiguas.
Estos recientes descubrimientos solo reafirman la idea que se tenia de que tanto Karahan Tepe como Göbekli Tepe fueron el hogar de una de las primeras civilizaciones del mundo. Los hallazgos en estos zonas anteceden a muchas obras construidas hace millones de años según las datas.
