Un ejemplo sorprendente del impacto de la IA es su aplicación en la alta cocina.
La fascinación por la tecnología y su integración en la vida humana ha sido una constante en la narrativa de ciencia ficción, desde libros hasta películas. En la actualidad, tras la revolución que supuso la llegada de internet, la Inteligencia Artificial (IA) está ganando protagonismo en nuestra cotidianidad. Desde conversaciones informales hasta debates filosóficos, la IA se ha convertido en un tema central, reflejando su creciente influencia en nuestras vidas.
La IA, definida como la creación de máquinas que imitan la inteligencia humana, está avanzando rápidamente gracias a la recopilación de datos y la interacción con las personas. Al igual que los teléfonos móviles y los ordenadores, la multifuncionalidad de la IA se está volviendo imprescindible en diversos sectores. Sin embargo, esta tecnología disruptiva también plantea desafíos, ya que la sociedad necesita tiempo para adaptarse a su rápido desarrollo.
A pesar de estos desafíos, la IA presenta innumerables oportunidades. Bajo esta premisa, Expansión y el diario EL MUNDO, en colaboración con BBVA, organizaron una jornada para debatir los beneficios que la era de la IA puede aportar a la sociedad. El evento contó con la participación de destacados ponentes que compartieron sus experiencias sobre cómo la IA está transformando sus campos profesionales.
Entre los ponentes se encontraban Álvaro Martín, Head of Data de BBVA en España; Gonzalo Rodríguez, Director de Desarrollo de Negocio de BBVA en España; Laura Rojas Marcos, licenciada en Psicología Clínica y doctora en Psicología Clínica, Forense y de la Salud; y el chef Joan Roca, del restaurante El Celler de Can Roca. Moderado por el subdirector de EL MUNDO, Juan Fornieles, el evento también incluyó una dinámica interactiva con ChefGPT, un «chef» digital que creó una receta basada en los ingredientes favoritos del público.
Aunque la IA puede generar incertidumbre, también ofrece oportunidades de aprendizaje. Laura Rojas Marcos destacó la importancia de adaptarse a estos cambios y de integrar nueva información en nuestras vidas. «Tenemos unos tiempos y ritmos que hay que respetar», afirmó, subrayando que la adaptación es clave para aprovechar las ventajas de la IA sin quedarnos atrás
Un ejemplo sorprendente del impacto de la IA es su aplicación en la alta cocina. Joan Roca explicó cómo están utilizando la IA para fomentar la creatividad culinaria, aprovechando el conocimiento de correspondencias moleculares de productos que ofrece ChatGPT. Aunque la tecnología está en constante evolución, Roca enfatizó la importancia de combinar la «inteligencia artesanal» con las innovaciones tecnológicas para seguir creando alta cocina.
Desde una perspectiva empresarial, Gonzalo Rodríguez resaltó la necesidad de poner al cliente en el centro del desarrollo tecnológico para mejorar su experiencia. «La clave de la adaptación del banco es poner al cliente en el centro para darle una mejor experiencia. El avance tecnológico nos ayuda a conformar todo eso», afirmó.
Realzar el valor humano y situarlo en el centro del desarrollo tecnológico es esencial para una integración exitosa de la IA. La era de la inteligencia artificial nos brinda herramientas que pueden expandir nuestra creatividad y mejorar nuestras vidas, siempre y cuando mantengamos el enfoque en el beneficio humano.