Una estampida durante una manifestación religiosa hindú en el norte de India dejó al menos 87 personas muertas y más de 150 heridas, según informaron las autoridades locales.
El incidente ocurrió en la aldea de Mughalgarhi, distrito de Hathras, durante un evento conocido como «satsang», donde se reúnen devotos para orar y escuchar a un líder religioso. La causa de la estampida aún se investiga, pero se presume que se debió al hacinamiento en el lugar.
Testigos afirman que la multitud se apresuró a salir del evento al final del mismo, lo que generó un caos que resultó en la tragedia. Entre las víctimas fatales se encuentran tres niños y más de 20 mujeres.
Las autoridades médicas confirmaron que la cifra de muertos podría aumentar, ya que muchos de los heridos se encuentran en estado grave. Se ha establecido un comité para investigar el incidente y determinar las responsabilidades.
El jefe de Gobierno de Uttar Pradesh, Yogi Adityanath, expresó sus condolencias por las víctimas y ordenó una investigación exhaustiva del hecho.
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Lamentablemente, este tipo de tragedias son comunes en India debido a la gran cantidad de personas que asisten a eventos religiosos y a la falta de medidas de seguridad adecuadas. En 2011, una estampida en un templo de Kerala dejó 102 personas muertas.
Es importante que las autoridades tomen medidas para prevenir este tipo de tragedias en el futuro, asegurando la seguridad de los asistentes a eventos religiosos y garantizando la adecuada gestión de las multitudes.