La PNP señaló que la banda de delincuentes es liderada por un clan familiar dedicada a controlar las extorsiones en el Callao
La Policía Nacional del Perú (PNP) detuvo a una familia de sicarios completa presuntamente implicada en casos de extorsión y robos en el principal puerto del Callao. Según las autoridades, se trata de la organización criminal conocida como ‘Los Vagos de Puerto Nuevo‘, la cual estaba preparada ante la posibilidad de un operativo policial.
Las autoridades descubrieron dentro de la vivienda un pasadizo secreto que se utilizaba para facilitar la fuga en caso de una intervención policial. Fue así como uno de los sobrinos de la propietaria del domicilio logró escapar cuando llegó la policía.
Además, en este escondite secreto se hallaron un chaleco antibalas, un arma de fuego y sustancias prohibidas, indicando que estos elementos podrían haber sido empleados para llevar a cabo actividades delictivas.
Según los informes de la policía, esta organización criminal estaría compuesta por Sheyla García, conocida como ‘La Sheyla’, junto a sus hijos Adrián Josué y Jorge Enrique Guevara. Sin embargo, la madre ha negado cualquier relación con actividades ilícitas y ha afirmado ser comerciante.
Lee también:
¡Indignante! Reportan 15 nuevas denuncias de abuso a escolares
“Yo paro trabajando, paro en el vaso de leche y comedor. Además, tengo mi carreta y mi mercadería afuera, yo vendo toallas”, comentó al ser intervenida.
Se ha relacionado al hijo menor de García, Jorge Enrique Guevara, de 18 años, con un homicidio en el Callao. Al parecer, el joven habría seguido el mismo camino que su hermano mayor al ser sicario, quien frecuentemente se fotografía y graba con armas de fuego en sus redes sociales.
“Esta no es casa de mi hijo, es mi casa y se respeta. No sé en qué está metido mi hijo y no sé qué hacer, porque me ponen entre la espada y la pared; de mi esposo y mi hijo”, indicó la madre de familia.
No obstante, la Policía desestimó estas afirmaciones, ya que alias ‘La Sheyla’ estaba al tanto de las actividades delictivas de sus familiares e incluso se sospecha que era ella quien tomaba fotografías de sus hijos y otros miembros del grupo con armas de fuego.
El dinero obtenido de los supuestos delitos se habría utilizado para financiar fiestas y reuniones familiares, según lo evidencian las imágenes. Actualmente, la madre permanecerá bajo arresto y a disposición de la Fiscalía, mientras que sus hijos siguen en busca y captura.
