El resultado de las elecciones de este domingo en Venezuela trasciende a ese país y puede reconfigurar la geopolítica regional e, inclusive, más extensamente, a nivel mundial, advierte el excanciller Luis Gonzales Posada.
Según opina, ese evento electoral “constituye una confrontación entre dictadura y democracia; entre economía de mercado y estatismo; entre un gobierno civil y otro de corte militar; entre el respeto a los derechos humanos y su arrasamiento; entre honestidad y corrupción”.
– Maduro amenaza con “guerra civil” y un “baño de sangre” si la oposición gana los comicios presidenciales…
– Sus palabras proyectan miedo, temor, de perder el gobierno y tener que responder ante la justicia por crímenes de lesa humanidad y corrupción. Está asustado, tembleque y por eso grita desaforadamente en los discursos, porque conoce la proyección de las encuestas que dicen que perderá abrumadoramente.
– ¿Todas las encuestas?
– Sí, todas. La empresa Meganalisis registra que el candidato opositor, González Urrutia, tiene una intención de voto de 72.1% sobre 14% de Maduro; Datincorp 62% a 20%; Delphos, 59.1% a 24.6% y Hercon, 68.4% a 27.%. La diferencia es abrumadora, entre 30 y 50 puntos. Esa es la realidad y ante ello amenaza, insulta y reprime.
– Especialmente a la lideresa María Corina Machado…
– María Corina es una mujer admirable, trabajadora, talentosa, valiente, que ha movilizado a su país contra la dictadura. La conocimos cuando vino a Lima y organizamos una manifestación en Pueblo Libre, al lado de la estatua de Simón Bolívar. Ahí estuvieron dirigentes de todos los partidos democráticos. Tenía el rostro hinchado porque la golpearon cuando subió a la mesa directiva, presidida por Diosdado Cabello, para protestar porque matones chavistas pusieron cadenas a la puerta de acceso al hemiciclo para que nadie saliera. En el estrado recibió un fuerte golpe en el rostro y cayó al piso sangrando, con el tabique roto, ante la risotada de Cabello. Pero siguió adelante, combatiendo a la dictadura.
– Hace poco denunció que fue víctima de un atentado criminal…
– Así es, un grupo de delincuentes ingresó a la urbanización donde se hospedaba, vandalizaron los vehículos de su comitiva con pintura y cortaron el cable de los frenos. Apresaron a su jefe de seguridad y a un ingeniero que la alojó en su domicilio. Han prohibido que las compañías de aviación le vendan y lo mismo hicieron con los hoteles. Bloquean las carreteras y atacan con matones a su comitiva. Pero no han podido detener el avance opositor que llena las plazas con multitudes, cada vez mayores.
– ¿El apoyo militar es determinante para el régimen?
– Es su guardia pretoriana. Los militares y la policía bolivariana, los servicios de inteligencia y contrainteligencia, respaldan incondicionalmente a Maduro, como antes hicieron con Chávez. Son quienes apresan, torturan y matan. A cambio, tienen gran cuota de poder. Cuentan con 12 ministros, presidentes de empresas públicas, embajadores, encargados de la compra y distribución de alimentos. Los militares son unos 150 mil y tienen 2 mil generales, más que toda la OTAN y Estados Unidos. Ridículo, ¿no?
– ¿Qué acusaciones pesan sobre ellos?
– Según el Alto Comisionado de la ONU, el periodo de Maduro registra 7 mil asesinatos y un reporte de 489 páginas de la OEA identifica 8,292 casos de ejecuciones extrajudiciales y 12 mil detenciones arbitrarias, torturas y tratos crueles e inhumanos. Similares informes han emitido los organismos de derechos humanos de la Comunidad Europea. En algún momento los uniformados tendrán que responder por estos cargos y por ello se aferran al poder.
– Estados Unidos ha hecho graves acusaciones…
– Sí. El Departamento de Estado de EE.UU., a solicitud de la DEA y el FBI, ofrece 15 millones de dólares de recompensa por la captura de Maduro y 10 millones de dólares por el general Padrino López y por Diosdado Cabello. Ninguno de ellos, asimismo, puede ingresar a territorio europeo y han confiscado parte de sus propiedades.
– ¿La represión sistemática explica el alto porcentaje de venezolanos en el exterior?
– Es una de las causas. También la pobreza, falta de empleo, colapso de los servicios públicos y bajos salarios. El éxodo escala los 8 millones de personas, el mayor en la historia de América. Y serán más, porque de acuerdo con la encuestadora Meganalisis, un 25% migraría si gana Maduro.
– ¿En Perú viven al menos millón 400 mil venezolanos o más?
– No tengo la cifra precisa porque hay muchos solicitantes de refugio que tramitan su estatus migratorio. La abrumadora mayoría gente buena, productiva. Los registros de migraciones de hace tres años indicaron que hay 5,562 médicos, 1,400 paramédicos, 8,189 enfermeras, 34,396 maestros, 9 mil profesores de educación física y 86 mil de otras profesiones, especialmente administradores de empresas, abogados, contadores e ingenieros. Durante la pandemia estuvieron en primera línea y muchos murieron protegiéndonos.
– También exportaron delincuentes…
– Así es, sicarios, proxenetas, ladrones. Hay 3 mil en la cárcel. Esa gente se ha infiltrado entre los migrantes, no solo en el Perú, sino en Chile, Colombia, Brasil y Estados Unidos, que ofrece una recompensa de 12 millones por la captura de los líderes del Tren de Aragua.
– ¿Han desestabilizado la región?
– Sin duda. No estábamos preparados para recibir ese volumen de gente, para brindarles educación, salud, vivienda y trabajo. Se permitió el ingreso masivo sin comprobar identidades ni antecedentes penales. Pero el éxodo continúa y continuará mientras se mantenga en el poder un gobierno oprobioso como el de Maduro, que cada vez cuenta con menos apoyo internacional, incluyendo al bloque del socialismo del siglo XXI.
– Su mayor soporte es Cuba…
– Que ha hecho un gran negocio al recibir petróleo regalado, subvencionado o canjeado por Cuba, que en compensación ha enviado agentes especializados en inteligencia y contrainteligencia. Son los que diseñan las estrategias para que el chavismo continúe en el gobierno.
– Pero hay regímenes fieles al chavismo…
– Ahora solo quedan Nicaragua y Cuba. Bolivia respalda con prudencia, aunque Evo Morales, personaje psicopático, siniestro y mononeuronal, lo sigue haciendo, responsabilizando del desastre venezolano a los Estados Unidos. El mexicano López Obrador guarda penoso silencio y el colombiano Gustavo Petro, esquiva. Lula del Brasil y Alberto Fernández de Argentina retiraron su apoyo, pero no así potencias extracontinentales. Me refiero a Rusia, China, Irán, Corea del Norte.
– ¿Cuál es la explicación?
– Poner una tercera base política en el hemisferio, después de Cuba y Nicaragua y hostilizar a Estados Unidos. Ese bloque les brinda protección diplomática, suministra armamento y otorga créditos. A cambio, han logrado un sometimiento tan absoluto que Caracas ofreció su territorio para que entrenen los militares rusos que combaten contra Ucrania. Con Irán tienen un pacto siniestro al igual que con remanentes de la guerrilla colombiana de las Farc y el Hezbollah.
– ¿Qué organismos políticos internacionales respaldan a Maduro?
– El Foro de Sao Paulo, el Grupo de Puebla, el ALBA, que ahora están silentes porque se avergüenzan del desempeño chavista.
– Volviendo a las elecciones presidenciales, hay garantías de las otras instituciones del Estado.
– Ninguna. Todas están sometidas al Ejecutivo. Estamos hablando del Consejo Nacional Electoral, de la Asamblea Constituyente, donde cuentan con 100 por ciento de adherentes, Ministerio Público, Poder Judicial, Defensoría del Pueblo y Contraloría, además de casi todos los gobernadores y alcaldes. En Venezuela no se mueve una hoja sin consentimiento de Maduro, pero a pesar de ese enorme poder no han podido frenar la gigantesca movilización popular impulsada por María Corina Machado en respaldo a González Urrutia.
– ¿Maduro tiene apoyo en nuestro país?
– Los grupos extremistas, entre ellos la candidata presidencial Verónika Mendoza, personaje extraño, que la conocemos porque fue secretaria o asistente de Nadine Heredia y después estuvo alineada con Pedro Castillo.
– ¿Cuál ha sido el comportamiento de la Cancillería sobre las elecciones?
– Las declaraciones del ministro González Olachea, calificando de “vileza” la amenaza de Maduro de que correrá sangre si no gana las elecciones, proyecta un pensamiento democrático, lo mismo que el comunicado de nuestra Cancillería demandando que se respeten los principios democráticos, así como los derechos humanos y las libertades fundamentales de todos los venezolanos. Imagino que a Maduro debe haberle dado un berrinche porque en las redes sociales sus partidarios han comenzado con insultos y calumnias, lo que significa que vamos por buen camino.
– Usted ha sido muy crítico de la política exterior de los países democráticos de la región…
– Sí, claro. Pienso que tener relaciones diplomáticas plenas, a nivel de embajadores, con regímenes totalitarios, solo ayuda a legitimarlos. No existe, siquiera, una justificación económica o comercial, porque con Nicaragua, Cuba y Venezuela solo tenemos ripio.
No podemos olvidar que Ortega asalta templos, encarcela sacerdotes, confisca monasterios, deporta docenas de opositores, clausura medios de comunicación y debe responder por 356 asesinados en las protestas del 2018.
– ¿Lo mismo piensa sobre Cuba y Venezuela?
– Así es. Pero, también debemos denunciar estos atropellos en foros internacionales. No olvidemos que el respeto a los derechos humanos es un valor universal. A mí me extraña, e indigna, que ante lo que ocurre en Venezuela, el secretario general de la OEA o algún país miembro del sistema interamericano no convoque a una reunión de urgencia para escuchar los puntos de vista de la oposición y emitir un firme pronunciamiento. ¿O están esperando el baño de sangre para reaccionar? Si no lo hacen, la famosa Carta Democrática Interamericana quedará como papel mojado en tinta y la dictadura seguirá avanzando.
