La peruana, abanderada de la delegación nacional, fue derrotada en un emocionante duelo en la modalidad de espada individual femenina.
María Luisa Doig, la primera deportista peruana en competir en los Juegos Olímpicos de París 2024, fue eliminada en su debut en la modalidad de espada individual femenina. Doig, quien también tuvo el honor de ser la abanderada del equipo peruano, enfrentó a Kiria Abdul Raham de Singapur en la ronda de 64.
El combate se llevó a cabo en el majestuoso Grand Palais de París y estuvo lleno de emoción y tensión. Doig comenzó con desventaja, pero logró igualar el marcador durante la segunda serie. En los momentos cruciales de la última serie, Doig tomó la delantera con un puntaje de 14-12. Sin embargo, en los últimos 25 segundos del enfrentamiento, Abdul Raham consiguió empatar 14-14, llevando el duelo a un golpe decisivo.
En este momento decisivo, la esgrimista de Singapur se mostró más precisa, anotando el punto final para sellar su victoria con un marcador de 15-14, avanzando así a la ronda de 32 y dejando a Doig fuera de la competencia.
A pesar de la derrota, María Luisa Doig mostró un gran nivel de habilidad y determinación en su enfrentamiento. Su participación en París 2024 representa un logro significativo, no solo por competir en los Juegos Olímpicos, sino también por haber sido la abanderada de la delegación peruana, un reconocimiento a su trayectoria y dedicación al deporte.
El duelo entre Doig y Abdul Raham fue seguido de cerca por los aficionados al deporte peruano, quienes esperaban una actuación destacada de la esgrimista. Aunque el resultado no fue el esperado, la experiencia adquirida en esta competencia de alto nivel será invaluable para el futuro de Doig en la esgrima.
La eliminación temprana de María Luisa Doig en los Juegos Olímpicos es un recordatorio de la dureza y la competitividad de estos eventos. Sin embargo, su desempeño en París 2024 sigue siendo un motivo de orgullo para el Perú. La atleta continuará siendo una inspiración para jóvenes deportistas y un símbolo de perseverancia y esfuerzo en el deporte nacional.
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En conclusión, aunque María Luisa Doig no logró avanzar más allá de la ronda de 64 en la esgrima de los Juegos Olímpicos de París 2024, su participación ha dejado una huella significativa. Su esfuerzo y dedicación sirven de inspiración para futuras generaciones de esgrimistas peruanos que aspiran a competir en el más alto nivel.
