El ejército se manifestó sobre el fallecimiento de joven soldado, quien perdió la vida dentro de un cuartel ubicado en el distrito del Rímac.
El pasado domingo cuatro de agosto, un joven soldado falleció ahogado en la piscina del cuartel militar Rafael Hoyos Rubio, ubicado en el distrito del Rímac. La víctima responde al nombre de Alexander Vargas Rojas, de veinte años de edad.
Ante el lamentable suceso, al interior del cuartel militar Rafael Hoyos Rubio, el ejército peruano, se manifestó mediante un comunicado, lamentando profundamente el fallecimiento del cabo Vargas Rojas, y, además, expresaron sus más sentidas condolencias a sus familiares y amigos en esos momentos de profundo dolor.
«El comando de la institución dispuso que el sistema de inspectoría realice las investigaciones que corresponden; asimismo, se le brindan todas las facilidades a la Policía Nacional del Perú y al Ministerio Público para que realicen las diligencias de acuerdo a ley, a fin de esclarecer los hechos«, precisa el comunicado del Comando de la Segunda División del Ejército del Perú.
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Cabe señalar, que el pronunciamiento del Ejército, se realizó luego de que el soldado de apenas veinte años de edad, fuera hallado sin vida dentro del cuartel Hoyos Rubio. Por su parte, las autoridades manifestaron que la causa del fallecimiento fue un ahogamiento, sin embargo, los familiares de la víctima sostienen que el cuerpo presenta signos de violencia.
Este suceso, ocurrió el último domingo cuando se encontraba en la dependencia militar, asimismo, los familiares de Alexander, cuestionaron la versión oficial de su muerte, debido a que detallan que la joven tenía muy buenas habilidades para la natación, sumado a ello, tenían conocimiento acerca de los golpes y agresiones que recibía dentro del cuartel.
Finalmente, la autopsia oficial, concluyó que Alexander, falleció por edema pulmonar, una condición que puede ser resultado de un ahogamiento, sin embargo, la familia no encuentra una información coherente, puesto a que indican que es contradictoria debido a los moretones y marcas que presentaban el cuerpo del soldado.
«Mi hijo varias veces me decía que les pegaban, porque ellos son abusivos superiores. Les pegan con puñetes, palos, varias cosas. Cuando salió por su cumpleaños también le agarraron a palazos«, manifestó el padre de la víctima.
