Fiscalía busca la disolución del partido político asociado a Antauro Humala, sentenciado por homicidio y secuestro.
Hoy, a las 10:00 a.m., el Poder Judicial realizará una audiencia clave para evaluar la posible disolución del partido Alianza Nacional de Trabajadores, Agricultores, Universitarios, Reservistas y Obreros (A.N.T.A.U.R.O.), vinculado a Antauro Humala, quien fue sentenciado por su participación en los sucesos del Andahuaylazo, que resultaron en la muerte de cuatro policías. El Ministerio Público ha presentado una denuncia formal solicitando la ilegalidad del partido por «promover actos violentos y de exclusión», argumentos que serán presentados por el fiscal de la Nación, Juan Carlos Villena.
El caso ha captado la atención pública debido a las implicancias políticas y sociales de la disolución de un partido que, según la Fiscalía, atenta contra la democracia. De acuerdo con Enrique Ghersi, abogado constitucionalista, el Ministerio Público cuenta con argumentos sólidos para que el Poder Judicial anule la inscripción del partido. «Es evidente que un partido que promueve actos que amenazan la vida y la integridad de las personas no tiene lugar en un sistema democrático», afirmó Ghersi.
La audiencia estará presidida por la Sala de Derecho Constitucional y Social Permanente, encabezada por el juez José Wilfredo Díaz Vallejo. Durante la sesión, se escucharán los alegatos tanto del fiscal Villena como de los representantes legales del partido A.N.T.A.U.R.O., en un proceso que podría extenderse por varios meses. Según las normativas vigentes, la sala tiene un plazo inicial de 60 días para emitir un veredicto, aunque podría solicitar una prórroga de 30 días adicionales si lo considera necesario.
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Este caso representa un importante precedente en el sistema judicial peruano, ya que se encuentra en juego la legalidad de una organización política cuya figura principal, Antauro Humala, está estrechamente relacionada con un episodio violento que marcó la historia reciente del país. De confirmarse la ilegalidad del partido, se sentaría un precedente sobre la disolución de organizaciones políticas que incurren en prácticas contrarias a los valores democráticos.
La decisión final será clave no solo para el partido A.N.T.A.U.R.O., sino también para el futuro de otras agrupaciones políticas que puedan estar bajo el escrutinio de la justicia por razones similares.
