El expresidente de la República aprovechó su intervención para hacer un repaso de su gestión y recordar sus humildes orígenes.
El expresidente Alejandro Toledo compareció en la última audiencia del juicio en su contra por el caso Interoceánica, uno de los mayores escándalos de corrupción de su gobierno, que involucra a la empresa brasileña Odebrecht. El exjefe de Estado, que cumple prisión preventiva en el penal de Barbadillo, inició su alegato final expresando su incomprensión sobre por qué había sido incluido en este proceso.
Toledo Manrique aprovechó la oportunidad para defender su presunta inocencia, recordando sus humildes orígenes. Mencionó que proviene de una familia de 16 hermanos y hermanas, siendo el único que tuvo la oportunidad de estudiar en el extranjero. “Como mencioné al principio, recibí una beca para estudiar en una universidad de San Francisco, pero no entiendo por qué mi amor por mi país, especialmente por las personas andinas y selváticas, me ha llevado a esta situación”, afirmó.
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“Soy inocente”, afirmó Alejandro Toledo, al igual que lo hizo Alberto Fujimori años atrás durante su juicio por los crímenes de su gobierno. Si es condenado, el líder de Perú Posible se convertiría en el segundo presidente en la historia republicana en ser juzgado por delitos cometidos durante su mandato. El adelanto de la sentencia está programado para el lunes 21 de octubre a las 2:00 p.m.
En los minutos finales de su intervención, el exjefe de Estado recordó que enfrenta un cuadro de salud complicado, agravado por el cáncer que padece. “Si esto va a continuar, lo único que les pido es que me dejen defenderme desde mi casa… Les ruego, por favor, déjenme curar o morir en mi casa”, fueron sus últimas palabras dirigidas a la jueza que lleva su caso.
