La avalancha de inversiones chinas en Perú, como el megapuerto de Chancay, no garantizan un incremento inmediato de nuestras exportaciones ni un beneficio para las nuevas industrias a nivel local, ya que -advierten especialistas- nos pone a merced del gigante asiático y nos convierte solo en proveedor de materias primas.
El Megapuerto de Chancay en Perú promete reducir en diez días el tiempo de travesía hacia Asia, lo que podría disminuir los costos logísticos y atraer carga de otros países de la región.
Sin embargo, Roberto De La Tore, presidente de la Cámara de Comercio de Lima (CCL), advierte que no se debe esperar un aumento inmediato en las exportaciones peruanas. Según De La Torre, el puerto inicialmente podría desviar hasta un 30% de la carga del Callao, el principal puerto del país.
“Reducir la travesía en 10 días al Asia será útil para disminuir costos logísticos, pero también atraerá carga de otros países de la región y la producción local, sin mayores incentivos, se puede ver afectada”, indicó.
Indicó que el desarrollo del Megapuerto de Chancay no es una solución mágica para el comercio exterior peruano.
Por su parte, Robert Evan Ellis, del Instituto de Estudios Estratégicos del Ejército de Estados Unidos, alertó: «En otras inversiones de América Latina y Asia hemos visto cómo China emplea técnicas predatorias y al final acaba llevándose los recursos naturales y aumentando la dependencia de los países en los que se instala. Con Chancay, Perú se está volviendo más dependiente de China».
ACERO CHINO
En ese sentido, se teme que, por ejemplo, China use el puerto de Chancay para inundar Perú y la región con acero barato. Así lo advirtió la Asociación Latinoamericana del Acero (Alacero), con sede en Sao Paulo, Brasil.
«Entre 2000 y 2023 China aumentó su producción de acero en casi un 700%. Pasó de producir el 15% del acero del mundo a producir el 54%», dijo. Por ello, consideró que el acero chino está hundiendo a la industria siderúrgica de América Latina.
Pekín no solo fabrica más acero que todo el resto de los países combinados. Además, lo exporta a un precio por debajo del mercado, haciendo que a los demás productores les resulte imposible competir, denuncia el directivo de Alacero.
MATERIAS PRIMAS
Jesús Salazar Nishi, presidente del Instituto de Desarrollo Industrial Sostenible (IDIS), consideró que este escenario pone en jaque a las industrias locales. “Perú seguirá exportando solo materias primas”, indicó.
Pese a las promesas del Gobierno, una baja tasa de restitución del IR en los alrededores de Chancay solo convertiría al Perú en puente de paso para la prosperidad de otros países, entre ellos, China.
A la par, gremios privados indicaron que la ZEE de Chancay podría desplazar a la industria nacional en favor del comercio chino.
Indicaron que el puerto, por sí solo, traerá prosperidad únicamente a otras naciones, indicando que China es importador neto de materias primas, a diferencia de EEUU.
AUTOS ELÉCTRICOS
Cabe indicar que del 25 al 29 de junio de 2024, la presidenta de Perú, Dina Boluarte, realizó una visita de Estado a la República Popular China. Uno de los motivos del viaje fue promover la llegada de más inversiones chinas al Perú, en la cita se reunió con 250 empresarios del gigante asiático.
En vísperas de su viaje, el gobierno cambió su ley nacional de puertos, cediendo a la gigante de logística china Cosco Shipping prácticamente un control sin restricciones sobre el megapuerto de Chancay, resolviendo así una importante disputa legal con Cosco.
Las numerosas empresas con sede en China con las que se reunió la presidenta Boluarte incluyen a la firma de telecomunicaciones Huawei, la empresa automotriz BYD, la firma de minería y construcción Jinzhao, la gigante de logística Cosco y China Railway Road Corporation (CRRC), entre otras.
En el sector automotriz, la reunión de Boluarte con ejecutivos de BYD, también en Shenzhen, destacó el esfuerzo por atraer al fabricante de automóviles a establecer una planta de producción de sus vehículos eléctricos en el país.
En la reunión se informó que en el Perú existe gran interés por sustituir las unidades de transporte público por vehículos eléctricos. Para ello, se plantea establecer un acuerdo con el gobierno chino, para conseguir una línea de garantía de financiamiento.
En minería, la reunión de Boluarte con ejecutivos de Jinzhao destacó la enorme influencia de las empresas con sede en China como los mayores inversores en el sector. El sector minero es en sí mismo el principal motor de la economía peruana con más de 11 mil millones de dólares en inversiones.
OTRO PUERTO
En la reunión de Boluarte con Jinzhao se destacó un proyecto de USD 405 millones adjudicado a la firma en marzo para construir un nuevo puerto de minerales cerca de la ciudad costera del Pacífico de Ica en el sur del país. El nuevo puerto es solo uno de los numerosos proyectos de infraestructura por parte de firmas de construcción chinas en el país. Instalación de un tren eléctrico que conecta la mina Las Bambas con Ica.
La presidenta Boluarte comentó que preparan inversiones chinas para crear hospitales inteligentes en el país. Además, ha dispuesto la implementación progresiva de la cirugía robótica en los hospitales.