Racing Club conquistó la Copa Sudamericana 2024 tras vencer 3-1 a Cruzeiro de Brasil en el estadio General Pablo Rojas de Asunción, Paraguay.
Con este triunfo, el conjunto argentino cerró 36 años sin títulos internacionales, un logro que resonó especialmente para su técnico, Gustavo Costas, quien también fue parte del histórico plantel que levantó la Supercopa en 1988, aunque en esa ocasión como jugador.
También lee:
Perú se consagra campeón sudamericano de motos acuáticas por séptima vez
Gustavo Costas: de jugador campeón a estratega consagrado
El técnico de 61 años, nacido en Buenos Aires, logró este título en una carrera marcada por éxitos en distintos países de Sudamérica. Durante sus inicios como entrenador, destacó en Alianza Lima, donde logró el bicampeonato del fútbol peruano en 2003 y 2004.
Tras la consagración en Paraguay, un periodista le recordó sus experiencias previas en clubes sudamericanos, una pregunta que llevó a una contundente respuesta del técnico.
Las palabras de Costas: “Debemos ser más humildes”
“¿Esa experiencia en diferentes equipos fue clave para liderar a Racing en esta Copa Sudamericana?”, cuestionó el periodista. Costas, visiblemente emocionado, respondió:
“Me pegaron tantos palazos que ahora tiran una cosa al aire… ¿Dónde salí campeón? En Paraguay, en Colombia, en Ecuador… Qué falta de respeto tienen los argentinos. Nosotros, que tuvimos a Messi y Maradona, ¿cuántos años pasamos sin ganar algo con la selección? Debemos ser un poco más humildes y respetar al otro”.
El entrenador también recordó con cariño su paso por Alianza Lima, destacando lo desafiante que fue conseguir títulos en el fútbol peruano, especialmente considerando factores como la altura de algunas sedes.
El bicampeonato con Alianza Lima: un legado imborrable
Costas lideró a un Alianza Lima que contaba con figuras emblemáticas como Waldir Sáenz, Jefferson Farfán, Marko Ciurlizza y Wilmer Aguirre, entre otros. En 2003, tras ganar el Torneo Clausura, los blanquiazules se enfrentaron a Sporting Cristal en una final disputada en el Estadio Nacional. Con goles de Roberto Silva y la “Foquita” Farfán, Alianza se impuso 2-1 y aseguró el campeonato.
En 2004, el equipo repitió la hazaña. Esta vez, tras un empate sin goles en la final nuevamente frente a Cristal, el título se definió en tanda de penales, donde Alianza triunfó 5-4. Estos logros marcaron un antes y un después en la historia del club íntimo.