– ¿Qué es lo mejor y lo peor, que ha visto usted en el año 2024 en Perú?
Bueno, lo positivo son las últimas decisiones del Tribunal Constitucional que está poniendo las cosas en su sitio. Por ejemplo, han establecido, en primer lugar, se ha ratificado la decisión del Congreso de la República de inhabilitar al ‘Lagarto’ Vizcarra por 10 años. Entonces, la buena noticia es que el señor Vizcarra no va a poder postular en las próximas elecciones, además del juicio que tiene pendiente, que lo va a llevar seguramente a la cárcel. Esa es una muy buena noticia porque, digamos, nos libramos de un sujeto que puso al país en vilo y que, con sus actos corruptos, generó la muerte de más de 200.000 personas. En fin, esa es una buena noticia. La otra buena noticia es el final de la Junta Nacional de Justicia creada por Vizcarra, con el objeto de ‘caviarizar’ el Ministerio Público y el Poder Judicial. El 5 de enero se instala una nueva Junta, que estamos todos los peruanos seguros que, sin duda, va a ser mejor que la que se va y que, sobre todo, esperamos los peruanos que otra vez se restablezcan los principios de neutralidad, independencia y solvencia en estas instancias que son fundamentales para la vida republicana. Porque el día de hoy son instancias ‘caviarizadas’ y, por lo tanto, se han puesto al margen de la Constitución y hacen lo que le da la gana. La negativa, yo creo que es el deterioro del gobierno de la señora Boluarte. Ya sabíamos que es un gobierno ineficiente, pero sus exabruptos últimos hacen que la estabilidad democrática necesaria para que se genere la transición hacia un nuevo gobierno y estoy pensando en el año 2025 como un año preelectoral, que puede verse ensombrecido, si es que mañana se genera una crisis en las alturas, que, por ejemplo, implique el adelanto de elecciones o la quiebra gubernamental. La señora Boluarte ya hace mucho daño con su gobierno, pero podría ser un daño peor si es que se produce un vacío de poder en los próximos meses del año 2025.
– ¿Cómo ha sido este año para los defensores de la democracia y la libertad en nuestro país?
Creo que hace un año de lucha, de avances. Creo que hemos logrado nosotros identificar el blanco. Hace años atrás hablamos con un grupo de abogados muy pequeño, la Coordinadora Republicana, que es el organismo que yo represento, decíamos que había una judicialización de la política, nos veían como raros porque decíamos que lo que pasa es que los políticos no quieren someterse a las reglas judiciales, a las investigaciones judiciales. Nada más falso. Lo que habíamos advertido era que un sector político ideologizado, el ‘caviaraje’, había capturado estos organismos, el Ministerio Público y el Poder Judicial, a través de la Junta Nacional de Justicia, que ya felizmente se va, y entonces había generado un contrapoder, digamos, temerario, corrupto y caviarizado, que ponía en jaque el funcionamiento de la república misma. De esto, primero, se ha tomado conocimiento y, en segundo lugar, algunas medidas que se han venido dando con sus avances y retrocesos, están poniendo en claro. Yo espero que con la nueva instalación de la Junta Nacional de Justicia se tengan otros criterios y, entonces, se proceda a una suerte de recuperación del Poder Judicial y el Ministerio Público para la democracia y la república, y se vaya limpiando. los organismos que han estado vinculados a los caviares.
– En 2025, ¿Cómo se configurarían las circunstancias para que se dé la vacancia presidencial?
Bueno, la vacancia presidencial, primero, tiene que tener fundamentos. O sea, la vacancia no es “quítame esta paja”. Tiene que haber cualquier cosa muy grave que implique una incapacidad moral y la incapacidad moral no es un concepto que puede ser utilizado a discreción. En segundo lugar, la vacancia requiere un número importantísimo de votos: dos tercios, que no es fácil de alcanzar y, tercero, hay que evaluar si en esta circunstancia, cuando ya estamos al final del régimen de Boluarte y hemos soportado sus improperios, sus vanidades y el desastre general de su gobierno, vale la pena vacarla, poniendo en tensión, generando un vacío de poder que puede comprometer la transición democrática. Porque, el próximo año, cuando ya se convoquen las elecciones, en el mes de abril, ya estamos en un momento distinto. Y, entonces, yo creo que la fortaleza moral y la capacidad de resistencia de los peruanos para soportar a esta señora, que se prolonguen los meses más y que apostemos, sobre todo, a la transición democrática.
– ¿Cómo debe hacer Perú para recuperar la libertad y la democracia el próximo año?
Bueno, tenemos que generar un amplio consenso de todas las fuerzas que hemos luchado contra el ‘castillismo’ y contra el ‘Lagarto’ Vizcarra. El lagarto vizcarra es el que abre la puerta a Castillo, eso hay que tenerlo claro.
