En un destacado encuentro celebrado en Rabat, el Ministro de Asuntos Exteriores de Marruecos, Nasser Bourita, junto a su homólogo belga, Bernard Quintin, reafirmaron los sólidos lazos de amistad y cooperación entre Marruecos y Bélgica, destacando las «excelentes» relaciones bilaterales y su significativo impacto estratégico en diversos sectores.
Según el Comunicado conjunto emitido tras el encuentro, ambos Ministros elogiaron la sólida amistad entre Sus Majestades el Rey Mohammed VI de Marruecos y el Rey Felipe de Bélgica, resaltando el respeto mutuo y la estrecha colaboración entre las familias reales y los pueblos de ambos países. En este sentido, se subrayó la importancia de continuar y profundizar la cooperación en áreas vitales como el comercio, las inversiones, la transición energética, las energías verdes, la cultura, la juventud, la migración y la seguridad.
Por otro lado, durante la reunión, el Ministro Quintin expresó su apoyo a la Iniciativa marroquí de Autonomía para el Sahara, presentada en 2007, describiéndola como un «esfuerzo serio y creíble» y una «muy buena base» para resolver la cuestión del Sahara. Además, recordando «la exclusividad de la ONU en el proceso político», reafirmó el respaldo de Bélgica a «la Resolución 2703 del Consejo de Seguridad de la ONU, la cual enfatiza el papel y la responsabilidad de las partes en la búsqueda de una solución política realista, pragmática, duradera y basada en el compromiso», subrayando la evolución positiva en la postura de algunos socios europeos e internacionales respecto a este tema.
El Reino de Bélgica también aplaudió los esfuerzos de Marruecos para fomentar la paz, la estabilidad y el desarrollo socioeconómico en África, en particular a través de iniciativas como la facilitación del acceso de los países del Sahel al Océano Atlántico y el Proceso de los Estados Africanos del Atlántico.
Por tanto, se destacó la implementación de reformas ambiciosas bajo el liderazgo del Rey Mohammed VI, incluyendo la reforma del Código de la Familia y la regionalización avanzada, lo que refuerza, aún más, el papel de Marruecos como un socio vital y fiable, así como un actor clave en el fortalecimiento de la estabilidad y la cooperación regionales.
El encuentro concluyó con un compromiso renovado de ambas partes para fortalecer la cooperación y continuar trabajando juntos hacia objetivos comunes, reafirmando el papel estratégico de Marruecos en el marco de la Visión Real dirigida a la diversificación de las asociaciones internacionales y europeas.
Por último, este diálogo fructífero no solo subraya la importancia de las relaciones Marruecos-Bélgica, sino que también pone de manifiesto el papel de Marruecos como un actor estratégico para los países europeos.
