Informantes en riesgo por falta de pago.
Tres informantes del Vraem denuncian que no recibieron recompensa por parte del Ministerio del Interior tras colaborar en capturas. Según información obtenida, los informantes, identificados bajo los seudónimos de “Ángel”, “Diablo” y “Orejas”, entregaron datos determinantes para la detención de cuatro personas vinculadas al grupo terrorista que opera en la zona.
Entre los capturados figuran José Quispe Zúñiga, alias “Josediño”, y Marcos Quispe Vargas, alias “Gabrielito”, ambos descendientes de cabecillas históricos de la organización. Las detenciones se produjeron en septiembre y noviembre de 2023 en localidades de Ayacucho, tras un seguimiento realizado por la Dirección contra el Terrorismo (Dircote).
El Gobierno destacó estas capturas como un importante golpe contra la estructura terrorista en la región, resaltando la labor de inteligencia desplegada durante varios meses. Sin embargo, los ciudadanos que facilitaron información clave afirman que no han recibido el pago ofrecido en el marco del Programa de Recompensas del Ministerio del Interior, el cual establece montos de hasta un millón de soles por datos que conduzcan a la captura de cabecillas de la organización.
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Los colaboradores aseguran que proporcionaron evidencias fotográficas, números telefónicos y detalles sobre la rutina de los detenidos, información que permitió su ubicación y posterior arresto. Además, indican que desde hace más de un año han realizado múltiples gestiones en Lima para exigir el pago sin obtener respuesta concreta.
De acuerdo con fuentes oficiales, el retraso se debe a la falta de documentación presentada por la Dircote para sustentar la participación de los informantes en la operación. No obstante, el expediente se encuentra en evaluación y se espera que en los próximos días se realice el desembolso del dinero a la Policía Nacional para proceder con el pago a los colaboradores.
Mientras tanto, los informantes permanecen en una situación de riesgo, ya que sin la compensación económica se ven imposibilitados de trasladarse a zonas seguras para evitar represalias.