Winston Churchill dijo: “La democracia es el peor sistema del gobierno, a excepción de todos los demás que se han inventado”
El mundo y sin duda Perú, está viviendo una fuerte crisis democrática atacado por denominados “caviares” que son una peste y por supuesto una izquierda asesina, retrograda, ratera e ideologizada y sin soluciones para absolutamente nada.
Hay varios elementos sueltos, desde que Churchill señaló su frase. El enorme cambio tecnológico con una Inteligencia Artificial y los robots, además de cambios en el mismo sistema computacional y la enorme población mundial de 8,200 millones, liderados por India y la China, ambos con un crecimiento político, militar y económico.
Más un EEUU que pretende ser la América de antes, como se ha señalado por su presidente actual Donald Trump.
Después del “fin de la Historia”, que muchos expertos predecían posterior a la caída del Muro de Berlín en 1989 y el fin del comunismo, con la victoria del liberalismo democrático se pensaba que el mundo entero sería una gran democracia feliz y prospera, con Consenso de Washington incluido: hoy desprestigiado en sus soluciones.
Hay montón de procesos electorales como el de Venezuela, que es realmente terrible pues para muchos esto sobrepasa aquello que para muchos da la impresión de que estamos secuestrados por políticos rapaces e insensibles.
Pero como Winston Churchill nos recuerda, pese a ser el peor sistema de gobierno la democracia es relativamente el mejor y eso es sin duda esperanzador.
Esto obliga a todos los que queremos vivir en libertad y prosperidad, a trabajar fuerte y colectivamente.
Y ello pues, como señalan expertos, la democracia no sólo es una forma de gobierno, también es una manera de organizarse y convivir en sociedad. Quienes son elegidos, al tener acceso a cargos públicos tienen un efecto directo y duradero en nuestras vidas públicas y privadas, deciden quién recibe salud, cuándo abren las escuelas, qué lugares tienen más policías, quién tiene acceso a justicia, cómo se gastan sus impuestos, cómo debe ser manejado el patrimonio nacional, etc. Todas estas situaciones cotidianas requieren de representantes de nivel.
Pero nos damos cuenta de que nuestros representantes, en vez de cumplir su mandato, dejan de lado la salud, transan con la educación, corrompen policías, controlan jueces, malversan nuestros impuestos y dejan que mafias y demás hierbas tomen posición de parte del territorio sin resquemor, entonces el problema no es la democracia, sino de las personas que se hacen llamar líderes políticos.
Churchill, por allí señaló, además de su famosa frase, que la democracia sigue siendo mejor que el fascismo, el comunismo o las dictaduras y tiene razón.
Pero hay que empezar en el Perú con apenas un cuarto por ciento del 1% del PBI mundial y a pesar de tener un territorio inmenso en reestructurar la “confianza” para la inversión y el empleo.
Y el requisito sine qua nom es un cambio brutal del sistema jurídico y respeto a las reglas de juego para la inversión. Esas tonteras del 10% del PBI para educación o el haber restaurado el 30% de impuesto a la renta a un sector agroexportador extraordinario y tiene para fácilmente aumentar al menos un 100%, denota la orfandad de los políticos incapaces. Hay más pero ya no tengo espacio.