El incidente en Entre Ríos expone la venta ilícita de pirotecnia a menores y la negligencia durante celebraciones estudiantiles.
Un adolescente de 16 años perdió la mano izquierda tras manipular pirotecnia durante un festejo estudiantil en Victoria, Entre Ríos, en Argentina, generando indignación y alarma pública.
El incidente se produjo durante el «Último Primer Día», celebración previa al último año, cuando el joven manipulaba explosivos en el techo de la Escuela Normal Superior «Osvaldo Magnasco».
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La explosión se produjo cuando el joven levantó su brazo izquierdo, desatando la detonación inesperada que provocó graves lesiones irreparables y la pérdida total de su mano.
Los servicios de emergencia acudieron rápidamente al lugar y los brigadistas de la Policía Nacional y Bomberos rescataron al adolescente, trasladándolo al Hospital Fermín Salaberry.
Martín Tello, jefe de la Policía de Victoria, explicó que el adolescente, en confusión, se subió a las rejas y levantó el brazo provocando la explosión.
Aunque está prohibida la venta de pirotecnia a menores, investigaciones revelaron que dos integrantes del grupo obtuvieron ilegalmente explosivos de una vivienda.
El adolescente fue trasladado al Hospital Fermín Salaberry, donde médicos tomaron una decisión crítica y optaron por amputar su mano izquierda por la gravedad de las lesiones.
El incidente provocó una investigación exhaustiva por parte de las autoridades, quienes realizaron allanamientos en centros comerciales y decomisaron pirotecnia vendida ilegalmente en la zona.
Las autoridades evaluaron que el joven no tenía conocimiento de la peligrosidad de la pirotecnia, la cual requiere mantenerse en el suelo y alejarse para evitar accidentes.
El incidente ha generado alarma en la comunidad, evidenciando la urgente necesidad de reforzar la normativa sobre venta ilegal de pirotecnia para proteger a los menores.
El suceso resalta la importancia de la educación y supervisión durante celebraciones estudiantiles para prevenir accidentes y garantizar la seguridad de los jóvenes en eventos escolares.
Las autoridades instan a reforzar el control en la venta de pirotecnia, subrayando que prevención y educación son clave para evitar tragedias similares en el futuro.
