La cifra de especies en extinción, entre ellos el koala, el ratón marsupial, canguro rata, el petauro gigante, fue calculada por un experto de la Universidad de Sydney, entre ellos el ratón marsupial especie pocas veces vista.
«La estimación de 480 millones de animales consumidos por el fuego se hizo hace un par de semanas, y los incendios ahora han quemado una mayor área del país. Eso significa que más de 800 millones de mamíferos, aves y reptiles han sido afectados por el fuego. En toda Australia, probablemente haya exterminado mil millones. Es un evento monstruoso en términos de geografía y cantidad de animales individuales afectados”.
La declaración fue hecha por el ecologista de la Universidad de Sydney, Chris Dickman. La cifra es espeluznante porque es difícil de mensurar visualmente. Decenas de especies en peligro de extinción probablemente desaparecerán para siempre producto de los incendios forestales históricos que además se cobraron la vida de 24 personas desde que comenzaron en septiembre último.
El ratón marsupial
Esas especies en riesgo son varias. Sobre todo aquellas que habitan la Isla Canguro cuya superficie fue arrasada en un tercio. Allí hay animales que son rara vez vistos, incluso, por aquellos científicos que los buscan con dedicación para poder investigarlos. Ese es el caso del dunnart o ratón marsupial. Los estudiosos del espécimen suelen pasar su vida universitaria quizás viéndolo apenas una vez en el terreno. Han sido detectados solo 48 veces desde su descubrimiento en 1969, y únicamente se los vio un puñado de veces en la isla desde 1990. Es probable que ahora no puedan observarlo nunca más: el lugar afectado por las llamas en esa isla al sur australiano frente a Adelaida es su hogar.
“Cien por ciento: todos nuestros registros (de presencia de este pequeño mamífero) desde 1990 están dentro de la cicatriz del incendio quemado. Se ha quemado todo el rango de la especie”, dijo Rosemary Hohnen, una ecologista que pasó más de dos años inspeccionando el dunnart de Isla Canguro. “Están en peligro verdadero, peligro real de extinción”, dijo la experta en declaraciones a The Washington Post.
Cenizas en lugar de vida
Dickman, por su parte, explicó cómo mueren los animales afectados. “La muerte por llamas es lo más obvio. Algunas de las imágenes de koalas nos presentan lo que es más vívido. En el frente de incendios, los bomberos han hablado sobre los chillidos de los koalas, solo gritos de dolor mientras mueren. Es simplemente horrible. Para otros, tal vez aquellos que viven en huecos de árboles o quizás aquellos que no han podido penetrar demasiado bajo el suelo, la inhalación de humo será un problema real. Para los demás, probablemente sea una desaparición más lenta. Para las especies que pasan a la clandestinidad y luego resurgen después de que los incendios han pasado, realmente no hay nada más que cenizas en la superficie. Entonces, les será muy difícil encontrar recursos”.
“No solo estamos hablando de koalas, estamos hablando de mamíferos, pájaros, plantas, hongos, insectos, otros invertebrados, anfibios y bacterias y microorganismos que son críticos para estos sistemas”, expresó Manu Saunders, investigador y ecologista de insectos de la Universidad de Nueva Inglaterra, Armidale, respecto a la cifra que conmovió al mundo. “Todos morirán”, agregó el profesor universitario.
Más especies
El diario norteamericano realizó un listado de aquellas especies que podrían desaparecer producto de los devastadores incendios que han terminado con una extensión tan grande como todo el territorio de Corea del Sur. Entre ellos se cuentan el canguro rata de hocico largo, un marsupial que probablemente no pueda recuperarse ya que necesita de humedad para vivir: su hábitat quedará destruido; por su parte, la cacatúa negra brillante que come únicamente las semillas de los robles tampoco tendrá cómo alimentarse.
Pero una de las cosas que más preocupa a los científicos es la cantidad de hemípteros -un tipo de insectos- que desaparecerán, vitales para la supervivencia de otras especies y vegetación. Es que este tipo de seres son fundamentales para el proceso de polinización y la alimentación de otros reptiles, por ejemplo. Se calcula que estos componen el grueso del cálculo hecho por Dickman.
Entre otros insectos se encuentra, también, una rara variedad de abejas. Los abejorros carpinteros. Su principal fuente de refugio, han sido quemadas. Tardan alrededor de 30 años en recuperarse al tamaño apropiado para que las abejas vuelvan a armar allí sus panales. Las llamas están llevando a la extinción en los estados de Victoria y Australia del Sur. También en la moribunda Isla Canguro.
Un mamífero planeador
Pero no sólo la vida silvestre sufre las consecuencias de los incendios forestales. Se calcula que alrededor de 100 mil vacas murieron hasta el momento.
Una vez terminado el incendio, los pequeños mamíferos podrían enfrentar otro peligro: los gatos salvajes y los zorros rojos. Estos animales, que en su mayoría lograron escapar de las llamas por su tamaño y agilidad, regresan a la zona devastada y buscan a aquellos animales -roedores, principalmente- que no encuentran comida para alimentarse. Débiles y desorientados, son presas fáciles.
Para Dickman, en tanto, también hay otras especies comprometidas. “Es algo llamado el petauro gigante: el mamífero planeador más grande del mundo. Se parece un poco a Gizmo de una de las películas de Steven Spielberg hace algunos años. Está restringido a los bosques de eucaliptos, tiene una dieta aún más restrictiva que el koala: se cocinarán en estos incendios. El petauro de vientre amarillo, también, otro marsupial increíblemente hermoso, no muy conocido. Están, nuevamente, restringidos a los bosques de eucaliptos, y serán muy susceptibles a estos incendios”.
«La estimación de 480 millones de animales consumidos por el fuego se hizo hace un par de semanas, y los incendios ahora han quemado una mayor área del país. Eso significa que más de 800 millones de mamíferos, aves y reptiles han sido afectados por el fuego. En toda Australia, probablemente haya exterminado mil millones. Es un evento monstruoso en términos de geografía y cantidad de animales individuales afectados”.
La declaración fue hecha por el ecologista de la Universidad de Sydney, Chris Dickman. La cifra es espeluznante porque es difícil de mensurar visualmente. Decenas de especies en peligro de extinción probablemente desaparecerán para siempre producto de los incendios forestales históricos que además se cobraron la vida de 24 personas desde que comenzaron en septiembre último.
El ratón marsupial
Esas especies en riesgo son varias. Sobre todo aquellas que habitan la Isla Canguro cuya superficie fue arrasada en un tercio. Allí hay animales que son rara vez vistos, incluso, por aquellos científicos que los buscan con dedicación para poder investigarlos. Ese es el caso del dunnart o ratón marsupial. Los estudiosos del espécimen suelen pasar su vida universitaria quizás viéndolo apenas una vez en el terreno. Han sido detectados solo 48 veces desde su descubrimiento en 1969, y únicamente se los vio un puñado de veces en la isla desde 1990. Es probable que ahora no puedan observarlo nunca más: el lugar afectado por las llamas en esa isla al sur australiano frente a Adelaida es su hogar.
“Cien por ciento: todos nuestros registros (de presencia de este pequeño mamífero) desde 1990 están dentro de la cicatriz del incendio quemado. Se ha quemado todo el rango de la especie”, dijo 0000000, una ecologista que pasó más de dos años inspeccionando el dunnart de Isla Canguro. “Están en peligro verdadero, peligro real de extinción”, dijo la experta en declaraciones a The Washington Post.
Cenizas en lugar de vida
Dickman, por su parte, explicó cómo mueren los animales afectados. “La muerte por llamas es lo más obvio. Algunas de las imágenes de koalas nos presentan lo que es más vívido. En el frente de incendios, los bomberos han hablado sobre los chillidos de los koalas, solo gritos de dolor mientras mueren. Es simplemente horrible. Para otros, tal vez aquellos que viven en huecos de árboles o quizás aquellos que no han podido penetrar demasiado bajo el suelo, la inhalación de humo será un problema real. Para los demás, probablemente sea una desaparición más lenta. Para las especies que pasan a la clandestinidad y luego resurgen después de que los incendios han pasado, realmente no hay nada más que cenizas en la superficie. Entonces, les será muy difícil encontrar recursos”.
“No solo estamos hablando de koalas, estamos hablando de mamíferos, pájaros, plantas, hongos, insectos, otros invertebrados, anfibios y bacterias y microorganismos que son críticos para estos sistemas”, expresó Manu Saunders, investigador y ecologista de insectos de la Universidad de Nueva Inglaterra, Armidale, respecto a la cifra que conmovió al mundo. “Todos morirán”, agregó el profesor universitario.
Más especies
El diario norteamericano realizó un listado de aquellas especies que podrían desaparecer producto de los devastadores incendios que han terminado con una extensión tan grande como todo el territorio de Corea del Sur. Entre ellos se cuentan el canguro rata de hocico largo, un marsupial que probablemente no pueda recuperarse ya que necesita de humedad para vivir: su hábitat quedará destruido; por su parte, la cacatúa negra brillante que come únicamente las semillas de los robles tampoco tendrá cómo alimentarse.
Pero una de las cosas que más preocupa a los científicos es la cantidad de hemípteros -un tipo de insectos- que desaparecerán, vitales para la supervivencia de otras especies y vegetación. Es que este tipo de seres son fundamentales para el proceso de polinización y la alimentación de otros reptiles, por ejemplo. Se calcula que estos componen el grueso del cálculo hecho por Dickman.
Entre otros insectos se encuentra, también, una rara variedad de abejas. Los abejorros carpinteros. Su principal fuente de refugio, han sido quemadas. Tardan alrededor de 30 años en recuperarse al tamaño apropiado para que las abejas vuelvan a armar allí sus panales. Las llamas están llevando a la extinción en los estados de Victoria y Australia del Sur. También en la moribunda Isla Canguro.
Un mamífero planeador
Pero no sólo la vida silvestre sufre las consecuencias de los incendios forestales. Se calcula que alrededor de 100 mil vacas murieron hasta el momento.
Una vez terminado el incendio, los pequeños mamíferos podrían enfrentar otro peligro: los gatos salvajes y los zorros rojos. Estos animales, que en su mayoría lograron escapar de las llamas por su tamaño y agilidad, regresan a la zona devastada y buscan a aquellos animales -roedores, principalmente- que no encuentran comida para alimentarse. Débiles y desorientados, son presas fáciles.
Para Dickman, en tanto, también hay otras especies comprometidas. “Es algo llamado el petauro gigante: el mamífero planeador más grande del mundo. Se parece un poco a Gizmo de una de las películas de Steven Spielberg hace algunos años. Está restringido a los bosques de eucaliptos, tiene una dieta aún más restrictiva que el koala: se cocinarán en estos incendios. El petauro de vientre amarillo, también, otro marsupial increíblemente hermoso, no muy conocido. Están, nuevamente, restringidos a los bosques de eucaliptos, y serán muy susceptibles a estos incendios”.