Filipinas / Agentes abatieron a traficantes de sustancias ilícitas
Trece presuntos narcotraficantes murieron abatidos por la policía en un intervalo de 24 horas en la provincia filipina de Bulacán, una de las zonas donde más sangre ha derramado la “guerra contra las drogas” del presidente Rodrigo Duterte.
Los agentes acabaron con las vidas de los 13 sospechosos y arrestaron a otros 109 durante una operación intensiva que se prolongó desde la medianoche del martes hasta ayer, informó en un comunicado la sede de la Policía Nacional en Bulacán, una provincia de 2,2 millones de habitantes al norte de Manila.
Las autoridades incautaron 101 gramos de shabú -clorhidrato de metanfetamina, una droga muy extendida entre las clases bajas filipinas- repartidos en 305 dosis, además de 670 gramos de marihuana, 18 armas de fuego de diversos calibres y 18 piezas de munición en un total de 57 redadas, según el comunicado.
Iniciada por Duterte al llegar al poder en junio de 2016, la “guerra contra las drogas” ha dejado hasta ahora más de 4.000 muertes, según los últimos datos oficiales, en este tipo de operaciones en las que los agentes tienen la orden de disparar a matar si el sospechoso opone resistencia física a su arresto.
Este año la campaña antidroga está sometida a un control más estricto tras varios escándalos de corrupción que salpicaron a la Policía.