La artista de 36 años se convirtió en la primera mujer negra en encabezar el Festival Coachella 2018
Puso un paréntesis a sus labores como madre de tres niños para hacer lo que mejor sabe: causar furor sobre el escenario. Beyoncé se presentó el último sábado en el festival de música Coachella, con un espectáculo de dos horas que dejó al público lleno de emociones y con un show que hizo historia por tratarse de la primera mujer negra que encabeza el festival.
En la edición pasada del festival, la artista tuvo que cancelar su presentación, ante el embarazo de sus mellizos. Lady Gaga ocupó su lugar en la cartelera estelar.
Beyoncé prometió que regresaría este año a Coachella con un espectáculo vigoroso y así fue.
Rememorando sus primeros éxitos, la diva arrancó con un “Crazy in love” que hizo retumbar la a las más de 100 mil personas que acudieron al festival, ubicado al sur de California .A su hit de 2003 le siguió “Formation” y “Sorry”, con una puesta en escena por todo lo alto compuesta por decenas de bailarines y unos juegos de luces propios de un concierto en solitario.
“Gracias por dejarme ser la primera mujer negra en ser cabeza de cartel del Festival Coachella”, gritó emocionada la estrella.
Beyoncé se metió al público al bolsillo cuando cantó “Deja Vu” junto a su esposo, Jay-Z. Sin embargo, la locura se desató cuando los asistentes fueron testigos de la reunión de Destiny’s Child, el grupo del que surgió Beyoncé.
Kelly Rowland y Michelle Williams aparecieron en el escenario para cantar sus éxitos de los 90, como «Say My Name», «Soldier» y «Lose My Breath».