Ángel Augusto Tahua, comandante de la PNP, es uno de los tantos agentes que enfermó en funciones y necesita con urgencia una cama UCI.
El COVID-19 cambió la vida de este valiente agente de la Policía Nacional del Perú (PNP) que servía al país en la primera línea de defensa contra la pandemia.
Dió positivo el miércoles 11 de agosto, se agravó el domingo 16 y desde el día lunes 17 permanece hospitalizado en una carpa ubicada en la parte posterior del Hospital Augusto B. Leguía del Centro de Lima por el colapso de sus pulmones.
Su esposa María, quien también dio positivo en su prueba de descarte, asegura que su esposo llegó derivado del Hospital Geriátrico San José de la PNP de San Miguel, con la promesa de una cama UCI, sin embargo, cuando llegó al nosocomio la realidad era otra.
Pese a estar enferma, se amanece todos los días al lado de la carpa donde estabilizan a Ángel. Pese a la insistencia, no consiguen la asistencia necesaria.
“El estado de mi esposo ha llegado a una situación muy crítica… hemos correteado, se ha buscado… a las cuatro de la mañana había una cama… al final por tema burocrático no hicieron nada”, denuncia con la voz cansada de tanto pedir respuestas.
“He movido cielo y tierra, he conseguido un poco de dinero, he buscado por todo lado… ahora que esto ya ha salido en las redes se ha conseguido una cama de oxigenación rápida mientras dure la desinfección de la cama UCI que han prometido, pero no me siento tranquila”insistió.
“Yo no soy médico, yo no sé cómo funciona esto, ahora solo estoy sentada aquí con mis hijos, esperando que alguien nos ayude”, manifiesta a la espera de una solución que después de varios días le permita dormir tranquila.
COMUNICADO
Ángel Tahua, vecino de Los Olivos, con 20 años de servicio en la institución policial, necesita una cama UCI con urgencia y una ambulancia tipo 3 para su traslado. Si usted desea ayudar a esta familia, no dude en comunicarse al 984652031.