Brasil aburre sin Neymar y logró una victoria por la mínima ante Venezuela.
En la previa del partido, el técnico de Brasil conformó su tridente con Gabriel Jesus, Richarlison y Roberto Firmino. Además, Tite formó su mediocampo con Douglas Luiz, Allan y Everton Ribeiro. En cambio, el técnico de Venezuela decidió atacar con Soteldo, Marchís y Rondón.
En la primera parte, Brasil dominó el partido, con Thiago Silva y Marquinhos jugando en el ataque. Sin embargo, la crisis creativa era evidente de un equipo lento y previsible. Los mediocampistas Allan, Douglas Luiz y Everton Ribeiro estuvieron desaparecidos. Incluso, el tridente Firmino, Gabriel Jesus y Richarlison deambuló desconectado arriba. La decepción brasileña al descanso era total.
En la segunda parte, Tite quitó a uno de sus dos volantes, Douglas Luiz, para poner a un mediapunta ofensivo, Lucas Paquetá. Luego, el partido se convirtió en una especie de contrarreloj, que jugaban con absoluta improvisación. No surgió ningún líder que imprimiese su sello a un Brasil alicaído que mostró una de sus peores versiones. Hizo falta un pequeño errorpara que Brasil tuviera la ansiada oportunidad que llevaba 67 minutos buscando.
Finalmente, llegó el gol salvador de Roberto Firmino, que se aprovechó de una asistencia del venezolano Marchís. El gol de Bobby fue celebrado con excesiva efusividad por Tite. Después, los brasileños se retiraron avergonzados por el espectáculo de horrores mostrado. Por ello, Brasil logró así tres victorias en tres partidos y lidera en solitario las eliminatorias con nueve puntos. Por último, Venezuela recibe a Chile el martes y Brasil se enfrenta a Uruguay en Montevideo.
