Fugitivos que traspusieron celdas serían venezolanos
El Poder Judicial dictó siete días de detención preliminar contra los agentes PNP: Frederick Laurente Huamani, Alejandro Gonzalo Asturay Lizana y Yuliño Montes Sedano, acusados de haber facilitado la fuga de tres delincuentes venezolanos de la celdas de la comisaría de Yerbateros (La Victoria), donde estaban detenidos.
La fuga de los delincuentes de la comisaría de Yerbateros ocurrió entre el 11 y 12 de junio de este año. Los fugitivos venezolanos responden a las identidades de: Dixon Arturo Sojo Lincon, Winder David Soto León y Jhoangel Antonio Núñez Carrasquel.
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Los tres investigados que se hallaban recluidos en la comisaría y consiguieron fugar, venían siendo procesados por los presuntos delitos de microcomercialización de drogas y robo agravado.
Los imputados debían estar custodiados en dicha comisaría hasta el 14 de junio, fecha en que el Instituto Nacional Penitenciario (INPE) iba a determinar sus traslados a un penal para que cumplan prisión preventiva por 9 meses.
Los tres policías se han defendido de la acusación diciendo que ellos no abrieron la puerta de los calabozos, sino que los delincuentes cortaron una varilla de sus celdas, sin explicar cómo se habrían agenciado de una tijera corta metales.
El fiscal provincial José Ronald Quispe Suárez logró acreditar la responsabilidad de los policías, invocada por el juez penal como argumentos legales para dictar la medida de detención preliminar contra los efectivos policiales.
Sujetos armados asaltan un bus y obligan a dar una “cuota voluntaria”
Pasajeros de un bus de transporte urbano denunciaron el jueves en llamada a una emisora radial que varios sujetos armados tomaron el vehículo por asalto y obligaron a los pasajeros a entregarles una “colaboración voluntaria” porque carecían de dinero para alimentarse.
Según contó, uno de los supuestos delincuentes dijo que apenas hace dos días había salido del penal Sarita Colonia del Callao; otro gritó que no quería hacer daño a ninguno de los viajeros, pero tenía que llevar dinero a casa; mientras que un tercero hizo notar que llevaba una pistola en la cintura.
Ante este amedrentamiento, los pasajeros aportaron los sencillos que tenían disponibles.