Advierte analista Pedro Yaranga
Especialista sostiene que pese a estar en la cárcel, siguen cobrando al Estado.
El terrorismo sigue siendo un peligro para el país, y en estos días en que se ha descubierto presencia de esta lacra en el Congreso y el Lugar de la Memoria, cabe recordar que también hacen apología en el sector Educación. De este y otros temas nos habló el especialista en tema de terrorismo y narcotráfico Pedro Yaranga Quispe.
-El tema del terrorismo ha vuelto a esta en debate, por lo descubierto por el congresista Edwin Donayre en el Lugar de la Memoria, la contratación de una asesora con sentencia por terrorismo en el Congreso, entre otras denuncias. ¿Qué opinión le merece?
Bueno, en general, en todo el país, seguramente también hay personas condenadas por terrorismo, y no dudo que haya este tipo de personas en el sector Educación. Acá se tendría que hacer todo un seguimiento, encargar a cada ministerio para que haga la respectiva investigación y hacer una data. No hay que olvidar que el Congreso es sensible políticamente y el MRTA, en más de una ocasión, intentó tomar el Parlamento y quién sabe si la trabajadora de la congresista [María Elena] Foronda pudo haber recabado información relevante. De otro lado, el Ministerio de Cultura debería tener mucho cuidado en el control de las personas que contrata para un lugar tan importante, como el LUM.
-¿Cree que en algo ayuda la aprobación en el Congreso de una Ley que prohíbe a los sentenciados por terrorismo trabajar en el Estado?
La aprobación de esta Ley justamente amerita hacer una data o registro de los sentenciados por terrorismo, narcotráfico, para de esa manera tener información a la mano. Lo otro, yo creo que estas personas de alguna manera deben reinsertarse, tampoco se trata de privarlos del todo, deben tener algún ingreso pues si no cómo hacen para mantenerse, pero debería ser en sectores que no son sensibles, como el privado, obviamente siempre con un seguimiento de las autoridades responsables. Hay personas que tienen muy dudosa reputación y siempre tienen que estar vigilados.
-No hay duda que así sean terroristas deben trabajar para mantenerse, ¿pero es posible un cambio de mentalidad en los líderes de Sendero o el MRTA, por ejemplo?
Los cabecillas son muy difíciles que cambien, aunque puede haber algunos casos. Yo conozco a dos personas que han cambiado de mentalidad y en el camino se han readaptado, hoy se dedican a la agricultura, totalmente se alejaron de ese pensamiento de terror. Pero hay personas que han purgado condena por terrorismo, nunca se han arrepentido y siguen con la misma mentalidad y de ninguna manera puedan readaptarse.
-Usted me hablaba que en el sector Educación también hay infiltrados del terrorismo. ¿Qué tan peligroso es esto en vista que desde ahí se coordinan las políticas educativas?
Claro que sí. Hasta hace tres años yo estuve haciendo un seguimiento en el sector Educación y he encontrado a varios docentes que habían tenido sentencia pero que sus plazas estaban esperándolos, eso porque dentro del sector Educación continua la corrupción. Es decir, esas personas estaban condenadas a 10 años, o 12 años, o 15 años en la cárcel y alguien sigue cobrando en nombre de ellos, por lo tanto, su plaza continúa vigente; esas personas salieron de la cárcel e inmediatamente recuperaron su plaza.
-¿A quién le corresponde frenar esta aberración?
Esa es una función directa del Ministerio de Educación, pero también función de los gobiernos regionales que controlas las diferentes sedes del sector, son ellos los que deberían hacer el seguimiento respectivo a estos casos.
-Se sabe que el Sutep, Conare y otros grupos vinculados al magisterio tienen a personas con este tipo de ideología terrorista, y están presente en muchas aulas de los colegios. ¿Qué hacer?
Si, sin duda alguna, son un peligro. Pero mucha de esta gente es recalcitrante, no tiene procesos en curso, entonces es muy difícil que las autoridades los retiren de sus cargos; aunque puede ser así si es que se tiene alguna prueba contundente contra ellos.
-En general, ¿considera usted que el terrorismo sigue siendo, de algún modo, una amenaza para nuestro país?
El terrorismo está sectorizado. Por ejemplo, los que todavía siguen alzados en armas, los Quispe Palomino en un sector importante del VRAEM [Valle de los Ríos Apurímac, Ene y Mantaro], pero no en la población sino en lugares alejados, pero de todas maneras resultan siendo una amenaza. No obstante, no son cantidad, de todas maneras estos generan efectos negativos, ahuyentan la inversión en nuestro país, principalmente.
EN RECONSTRUCCIÓN
-¿Cree que Sendero Luminoso sigue operando?
Ellos están trabajando hacia la segunda reconstitución del partido, como se sabe en los documentos internos de puño y letra de Abimael Guzmán (…) Se sabe que el Movadef se constituye siguiendo los tres estamentos de la revolución según el maoísmo: el partido que dirige políticamente una revolución, el Ejército que combate y los frentes sociales. Movadef nace en 2009 como frente.