Durante la temporada de verano es importante prestar especial atención a la alimentación y la hidratación de los niños, ya que las altas temperaturas pueden aumentar el riesgo de deshidratación y otros problemas relacionados con el calor.
“Es importante que los niños mantengan una alimentación balanceada tanto en vacaciones escolares de verano, porque se suelen relajar un poco, se toman más libertades. Entonces eso no está del todo bien, porque la alimentación balanceada debe mantenerse todo el año”, sostuvo la licenciada en nutrición, Lucía Huamán, en el programa Tu Salud en Cayetano, espacio digital del canal Cayetano + de la Universidad Peruana Cayetano Heredia.
Así mismo, considera importante que el niño esté hidratado, que consuma agua, considerándose esta prevención para evitar “para evitar estos tan conocidos golpes de calor que generalmente puede afectar a los más pequeños”.
Recomendaciones para tomar en cuenta en esta temporada de calor
Alimentación:
Fomenta el consumo de frutas y verduras frescas, ya que son ricas en agua y proporcionan nutrientes esenciales.
Las frutas de estación como sandía, melón, fresas, piña y pepino son opciones hidratantes y refrescantes.
Proteínas:
Incluye fuentes magras de proteínas como pollo, pescado, legumbres y huevos, queso
Líquidos:
Fomenta el consumo regular de líquidos, como agua, jugos naturales y licuados (aunque de preferencia, las frutas en su estado natural son mejores porque se aprovecha sus fibras).
Limitar las bebidas azucaradas y los refrescos envasados (los etiquetados con octógonos). Nada mejor que el agua sola.
Hidratación:
Asegurarse que los niños beban suficiente agua a lo largo del día. Esto es crucial para prevenir la deshidratación.
Electrolitos:
En casos de sudoración intensa, considera dar bebidas deportivas para reponer los electrolitos perdidos. Sin embargo, evitar las que contengan altos niveles de azúcar.
Otras recomendaciones para evitar golpes de calor:
Vestimenta Adecuada:
Vista a los niños con ropa ligera y de colores claros.
Usa sombreros y gafas de sol para protegerlos del sol.
Horarios Adecuados:
Limitar las actividades al aire libre durante las horas más calurosas del día y busca sombra cuando sea posible. Sobre todo, ahora que las temperaturas y la radiación solar son altas.
Protector Solar:
Aplica protector solar adecuado para la edad de los niños antes de salir al sol.
Descanso:
Asegúrate de que los niños descansen y se refresquen regularmente, especialmente después de la actividad física.
Vigilancia de Síntomas:
Esté atento a signos de deshidratación, como sed extrema, mareos, debilidad y confusión.
En resumen, una alimentación equilibrada, una hidratación adecuada y tomar precauciones para evitar el calor excesivo son fundamentales para garantizar la salud y el bienestar de los niños durante la temporada de verano.
