Aún seguimos pensando, que el Presidente Petro tiene buenas intenciones. Solo que sumando la ingenuidad y obrando con pendejez, los resultados podrían ser catástróficos.
Lo explicamos en «cámara lenta». Muy buena intención que el Presidente Petro quiera acabar con los cultivos de coca. …Pero aquí aparece la ingenuidad y la pendejería: «El Gobierno permitirá que el campesino siga cultivando la hoja de coca, -cultivo ilícito-, mientras «aparece» el cultivo lícito sustituto». De esta manera, el Presidente propone, que el campesino continúe cosechando hoja de coca, que será vendida -a super excelente precio-, ….¿A quién o a quiénes ?… para que los compradores la boten a la basura ¿ o para que continúen con el narcotráfico ?
Continuar con el cultivo ilícito, es permitir o facilitar que llegue más droga a los consumidores «profesionales» o que aparezca más oferta a la «nueva demanda entre las juventudes». O sea, que los cultivadores le «maman gallo» (frase aceptada por la RAE, equivalente a *tomar el pelo*) a Petro, hasta encontrar el cultivo lícito.
Y colateralmente, entre más coca haya, más deterioro hay en la Economía Nacional.
De todas maneras, si antes de cultivar la coca, siembra ilícita, estaban cultivando siembra lícita, no sería más que volver a su siembra anterior. Pero no lo van a hacer, ni lo harán, porque han estado recibiendo por las pacas de coca, lo que jamás van a recibir por cualquier otra siembra, que además requiere mayor mano de obra e insumos.
Pero Petro, tiene hoy por hoy un problema de conciencia, que él mismo se lo ha impuesto y es el de tratar de congraciarse con la masa, lamentablemente pobre en dinero y pobre culturalmente, que lo eligió. Lo estamos viendo, con los pillos desalmados que él va a sacar de la cárcel para colocarlos como «gestores de paz» y en este momemto con los sembradores de coca. No faltará quien entre ellos, decida montar su propio laboratorio para producir la cocaína. Cuando lo más sencillo, debería ser: Emitir un Decreto rápido a «pupitrazos», declarando que sembrar coca es una actividadil ílicita y por lo tanto, será perseguida por la Ley.
Ustedes recordarán, cómo la Inteligencia Militar Norteamericana, pasó a buen «retiro», al General Qasem Soleimani, el indestructible Comandante de las Fuerzas Quds del Cuerpo de los Guardianes de la Revolución Islámica, quien tan pronto llegó a Irak, fue abatido ahí mismo, en el aeropuerto. ¿ Por qué viene a cuento este tema ? Muy sencillo: La Inteligencia Militar Norteamericana, ubicada a cientos de kilómetros, acabó con este personaje terrorista que gozaba de la bendición del Gobierno Iraní, el Ayatollah.
Entonces, ¿ cómo es posible, que si en un principio, años atrás, mucho antes de Petro, no había coca sembrada en Colombia y luego aparecen las primeras miles de hectáreas sembradas, jamás haya habido un trabajo de Inteligencia Militar continuo en Colombia, para acabar con este flagelo ? Y lo$ Gobierno$ hayan $ido permi$ivo$, ha$ta el punto que ya en el 2017, habían registrada$ 171.000 hectárea$ $embrada$ de coca. En el 2020, fueron regi$trada$ 143.000 hectárea$, la$ cuale$ aumentaron a 204.000 en el 2021.
Y como dice el famoso son cubano: «¿ Dónde, dónde estabas tu (Gobierno Colombiano) dónde ? Cuando ya en Colombia, se está produciendo «la bobadita» de 1400 toneladas-año de Clorhidrato de Cocaína. La cifra más alta, desde el 2000, hace 22 años.
De manera que si Petro, pensara racionalmente, no estaría pregonando que ello es una «muestra evidente del fracaso de la guerra contra las drogas», $ino una mue$tra evidente de la corrupción de lo$ Gobierno$ anteriore$. Pensar como piensa Petro, de «que la sopa no está sabrosa, porque la cuchara está hueca» va a llevar a este Gobierno a caer en $er otro má$.
Puede $er. Para él es muchísimo más importante «consagrar» a los pillos en «Gestores de Paz», cambiar los aviones Kfir, ante las «amenazas» que tiene Colombia, que luchar contra la corrupción.
(*) Miembro A.I.E.L.C.
