Las acusaciones contra Andrés Hurtado, mejor conocido como ‘Chibolín’, continúan aumentando, mientras la Fiscalía determina el tiempo de prisión preventiva
El empresario Tomás Pérez Quevedo reveló que pagó $100 mil al presentador Andrés Hurtado por conseguirle una cama en la UCI durante la pandemia de COVID-19 para un familiar. En una entrevista con el programa Beto A Saber, Pérez Quevedo relató cómo el dinero fue entregado a una de las hijas de Hurtado.
Según el empresario, Hurtado inicialmente ofreció su ayuda y logró que su suegro obtuviera acceso a una cama UCI en un hospital público. Agradecido por el gesto, Pérez Quevedo accedió a realizar una donación de $100 mil bajo la promesa de un proyecto filantrópico de Hurtado, que nunca se concretó.
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¿Qué sucedió?
El empresario también mencionó que Hurtado le solicitó más favores, como un reloj, lo que motivó que cortara toda relación con el presentador. Este testimonio se suma a las denuncias que vinculan a Hurtado con una red de tráfico de influencias y lavado de activos. Además, Pérez Quevedo expresó que, al intentar obtener más información sobre el supuesto proyecto benéfico, Hurtado no ofreció detalles, dejándolo con la sensación de haber sido engañado.
El caso de tráfico de influencias en torno a Hurtado refleja las deficiencias del sistema de salud en Perú durante la pandemia, cuando el acceso a camas UCI se convirtió en un privilegio para quienes podían pagar.
