85% DE LA POBLACIÓN ES AFECTADA POR CORTE DE AGUA POTABLE
Las intensas lluvias que han azotado a la ‘Ciudad Blanca’ en las últimas horas están poniendo en jaque el suministro de agua potable para la mayoría de la población arequipeña.
La creciente turbidez y los altos niveles de lodo en el río Chili, principal fuente de abastecimiento de agua en la región, obligaron a las autoridades locales a suspender el servicio en diversas zonas de la ciudad.
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En la víspera, las lluvias registradas en la ciudad y sus alrededores incrementaron de manera significativa la turbidez del río Chili, afectando la calidad del agua que se extrae de sus cuencas para abastecer a la población. El aumento en el nivel de lodo y sedimentos ha puesto en riesgo el funcionamiento normal del sistema hídrico, lo que, a su vez, ha desencadenado la crisis actual en el servicio de agua potable.
Por su parte el Servicio de Agua Potable y Alcantarillado de Arequipa (Sedapar), encargada del suministro de agua potable en Arequipa, informó que al menos el 85% de la población se ha visto afectada por la suspensión temporal del servicio.
Esta medida ha sido tomada para evitar el arenamiento de las instalaciones y prevenir daños en las plantas de tratamiento de La Tomilla y Miguel de la Cuba Ibarra. Las compuertas de captación de agua de estos reservorios fueron cerradas para evitar que el exceso de sólidos y lodo pudiera afectar los procesos y distribución.
Las intensas lluvias en Arequipa no solo han provocado el corte del servicio de agua potable en varias zonas, sino que también han ocasionado daños materiales en diversos distritos, como Paucarpata. Uno de los incidentes más graves ocurrió en la urbanización La Finca, donde un forado de casi tres metros de diámetro se formó en el suelo, provocando el ingreso de agua a varias viviendas y dejando a una familia sin hogar. “El agua ha arrasado con todo lo que ha podido”, comentó una vecina afectada por la inundación.
Además de los hundimientos, las torrenteras en distintos sectores de la ciudad colapsaron, provocando desbordes y dificultando la movilidad. Las principales vías se han visto anegadas, lo que ha obstaculizado el paso de vehículos y peatones.