Crimen en Trujillo sería por ajuste de cuentas
Overt David Bazan Villanueva, el presunto líder de la banda criminal “Los Cachacos” quien estaría detrás de la extorsión al futbolista Paolo Guerrero, fue asesinado en feroz balacera en el distrito de Laredo, en Trujillo, durante un concurrido concierto del grupo “Los Claveles de la Cumbia”. El presunto motivo del ataque sería un ajuste de cuentas relacionado con el grupo criminal “Los Pulpos”.
En la madrugada del 24 de noviembre, dos sicarios llegaron en motocicleta hasta la discoteca White Power ubicada en la calle San Antonio 339, en Trujillo, y una vez dentro dispararon a quemarropa contra Overt David Bazán Villanueva, alias ‘Chato Oré’ y Richard Anderson Mines Acevedo, desatando el pánico en el concierto. Los más de 20 disparos también impactaron a otros seis asistentes al local, quienes fueron trasladados de emergencia a varios centros de salud del distrito.
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En febrero del presente año, alias “Chato Oré” fue intervenido por agentes del Escuadrón Verde en un operativo. Tras su captura se conoció que ya registraba antecedentes criminales por agresión, extorsión y robo. “Es el brazo armado, ejecutivo, violento, quien dirige a los llamados ‘cachaquitos’, quien dirigió a los que participaron en las extorsiones de la señora madre de este prestigioso futbolista”, declaró el coronel Víctor Revoredo al portal RPP.
Tras ser encarcelado por sus crímenes en el penal El Milagro de Trujillo, en marzo el “Chato” fue trasladado al penal de alta seguridad Cochamarca en Cerro de Pasco junto con otros 13 criminales más. Ellos continuaban operando desde el interior del establecimiento penitenciario, coordinaban delitos a través de sus visitas y se comunicaban con el exterior gracias a antenas ilegales en su perímetro.
En febrero de este año, el reconocido futbolista peruano Paolo Guerrero denunció las amenazas de extorsión que él y su familia enfrentaron desde Trujillo, debido a su incorporación al equipo Universidad César Vallejo para participar en la Liga 1 y en la Copa Sudamericana. Debido a este suceso, Guerrero tomó la decisión de pausar su incorporación al Club Universidad César Vallejo “por la seguridad de su entorno familiar”.
