Apareció desorientado en la audiencia
El fundador de WikiLeaks, Julian Assange, acusado de espionaje por Estados Unidos y amenazado de extradición, apareció desorientado el lunes durante una audiencia judicial en Londres, su primera comparecencia en persona desde hace seis meses, cuando fue detenido en la embajada de Ecuador.
El australiano, de 48 años, con cabello largo y bien afeitado, compareció vestido con una camisa blanca y un jersey azul bajo una chaqueta del mismo color ante el tribunal de Westminster, que examinó la fecha de una próxima vista de extradición.
Balbuceante, pareció tener dificultades para recordar su fecha de nacimiento y al final de la audiencia afirmó ante la juez Vanessa Baraitser que no había entendido lo que acababa de suceder.
La jueza denegó hoy una petición de la defensa del australiano para aplazar durante tres meses el arranque de ese proceso judicial. Por su parte, en su comparecencia, Assange, que lució un traje azul marino, tuvo algunas dificultades con el habla a la hora de confirmar su identidad y fecha de nacimiento, con titubeos, pausas y tartamudeos, de los que se han hecho eco los medios británicos.
La Justicia estadounidense lo requiere por los miles de documentos secretos que aireó su portal WikiLeaks y le acusa, entre otros delitos, de «conspiración» para infiltrarse en sistemas informáticos gubernamentales.