La Universidad Nacional de Ingeniería (UNI) continúa avanzando en el desarrollo del nanosatélite Chasqui 2, una iniciativa con fines académicos que busca contribuir al estudio del cambio climático y la reducción de basura espacial.
Según Raúl Figueroa, director general del equipo Chasqui 2 y estudiante de Ingeniería Mecánica Eléctrica, el proyecto ha ingresado a su segunda etapa de elaboración y desarrollo.
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Segunda etapa: de simulaciones a financiamiento
«Estamos en la segunda fase del proyecto. Ya superamos la etapa de simulaciones y ahora podríamos empezar a buscar financiamiento. La UNI está evaluando proyectos formativos para desarrollar componentes clave, como la carga útil del nanosatélite«, explicó Figueroa.
El objetivo principal del Chasqui 2 es estudiar partículas en la baja atmósfera terrestre, generando datos fundamentales para analizar el cambio climático y los efectos de la radiación solar. Adicionalmente, su misión secundaria es desarrollar sistemas de control que contribuyan a mitigar el problema de la basura espacial, un riesgo creciente para los satélites en operación.
Capacitación y soporte internacional
En 2023, miembros del equipo del proyecto fueron capacitados en el laboratorio de Física de la Atmósfera de la Universidad de Colorado (EE. UU.), lo que fortaleció el soporte científico necesario para el desarrollo del nanosatélite.
Por otro lado, la segunda etapa del proyecto se desarrollará en colaboración con la Universidad Estatal del Suroeste de Rusia (UESOR) y la agencia espacial rusa Roscosmos. Aurelio Padilla Ríos, promotor del proyecto Chasqui 1 y ahora asesor de Chasqui 2, confirmó que las pruebas finales del nanosatélite se realizarán en Rusia.
Dos posibles lanzamientos
El lanzamiento del Chasqui 2 se podría llevar a cabo mediante dos opciones.
- Desde la Estación Espacial Internacional (EEI): Un cosmonauta lo colocaría en órbita durante una caminata espacial, como ocurrió con el Chasqui 1 en 2014, lanzado desde la nave Progress M-22M.
- Mediante un cohete: El nanosatélite se integraría en un lanzamiento compartido con otros satélites.
«Uno de los objetivos es garantizar la estabilidad, orientación y maniobrabilidad del satélite en el espacio. Cuando termine su misión, reingresará a la atmósfera de manera controlada, evitando convertirse en basura espacial«, detalló Padilla Ríos.
Colaboración estratégica y costo reducido
José Oliden Martínez, exjefe del proyecto Chasqui 1, destacó el valor de la colaboración internacional para el Chasqui 2, que cuenta con aliados estratégicos en diversos países. Además, resaltó que el lanzamiento desde la EEI sería una opción más económica gracias al respaldo de Roscosmos.
Innovación peruana en el espacio
El proyecto Chasqui 2 representa un hito en la investigación y desarrollo aeroespacial del Perú, colocando a la UNI como una institución clave en el avance tecnológico del país.
