Mónica Yaya critica medidas para enfrentar inseguridad
Por: Pablo Carranza
– ¿Qué le suscita el paro organizado por un sector de transportistas ante la extorsión y la criminalidad?
Estoy absolutamente de acuerdo con la protesta pacífica de transportistas y otros sectores de comerciantes, porque en estos momentos se debaten entre la vida y la muerte. Si ellos no trabajan, sus familias no se alimentan, no comen y si ellos trabajan, ellos como fuente de sustento familiar pueden morir, pueden perder la vida. En consecuencia, yo creo que el abandono del Estado ha empujado a los transportistas a anunciar esta huelga, este paro, que en tanto sea pacífico, cuenta con mi solidaridad.
– ¿Por qué la delincuencia ha avanzado a niveles inéditos en el Perú?
Lo que sucede es que lamentablemente en Perú el presupuesto público se gasta en temas no prioritarios, como, por ejemplo, cambiar el avión presidencial, cuando lo que necesitamos los peruanos, es que se dote a la Policía de los recursos necesarios para establecer un sistema de inteligencia que permita identificar a los delincuentes. Además, bloquear las comunicaciones que provienen desde los penales en donde se encuentran los jefes de las bandas de sicarios. Se necesita que el Estado priorice el gasto y adquiera el sistema de inteligencia, todo el sistema de bloqueo para las organizaciones criminales que necesita la Policía Nacional del Perú. También, obviamente, se necesita un ministro capacitado y con la ética suficiente como para al mismo tiempo poder luchar contra la corrupción que puede existir dentro de la Policía Nacional del Perú manchando la labor de buenos policías. Creo que aquí se necesita tanto recursos como ética por parte del ministro y sobre todo por parte de la presidenta de la República para que deje de efectuar gastos en estos momentos innecesarios con el presupuesto público. Ese presupuesto en lugar de comprar un avión presidencial lo requerimos para salvar nuestras vidas adquiriendo todos los sistemas de inteligencia, bases de datos, intercambio de comunicación, interconexión con todas las comisarías del país para salvar nuestras vidas.
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– ¿Cree que falta liderazgo político?
Claro, pero el liderazgo político no solamente se demuestra diciendo que se va a poner mano dura contra la delincuencia. Ese liderazgo político tiene que expresarse en decisiones cruciales como, por ejemplo, gastar el dinero público en seguridad y no en vanidades como los de la señora Dina Boluarte. Además, ella también, ese liderazgo debería expresarlo, por ejemplo, rechazando de manera expresa la modificación al Código Penal que de manera irresponsable se ha aprobado en el Congreso de la República. Brindando facilidades, el Congreso de la República con la modificación del Código Penal ha brindado facilidades a las organizaciones criminales para que estas dejen de llamarse organizaciones criminales y por lo tanto las penas más bien sean reducidas. Se les ha facilitado la comisión de delitos a través de organizaciones criminales. A la señora Dina Boluarte no se le ha escuchado para nada protestar contra esa ley aprobada en el Congreso de la República.
– Entonces ¿Qué dice de la Nueva Ley del Terrorismo Urbano que se debate en el Congreso?
A mí me parece que demuestra la falta de personalidad de la señora Dina Boluarte al tratar de llamar terroristas a todos ellos que no están de acuerdo con ella. Simplemente está utilizando esa mala costumbre de llamar terroristas a sus enemigos políticos, a quienes critican su frivolidad y hace mucho daño al sistema de lucha también contra el terrorismo, porque lo que debe hacer el Estado es identificar correctamente a terroristas y a quienes han tenido vínculos con el terrorismo. Contra ellos hay que luchar de manera clara, expresa y directa. Se los cubre con un manto de impunidad a los verdaderos terroristas que han sido, dicho sea, de paso socios de la señora Dina Boluarte cuando se llama terrorista a todo el mundo.
– ¿La delincuencia comenzó a incrementarse con la presencia de la migración venezolana?
No creo que todo haya comenzado con la inmigración venezolana, porque antes de la inmigración venezolana teníamos también organizaciones criminales, organizaciones de narcotraficantes, organizaciones dedicadas al proxenetismo, organizaciones dedicadas al ataque ilegal, al comercio ilegal de oro. Es decir, la delincuencia no nació con la inmigración de los venezolanos. Creo que aquí lo que hay es una absoluta incapacidad para luchar contra la delincuencia, sea cual fuere la nacionalidad de quienes cometen delitos. Pero, además, no han tomado una acción básica, que es la de filtrar a los extranjeros que puedan haber cometido delitos y no permitirles el ingreso al Perú.
