El mediocampista argentino exige ser contratado por el club victoriano, pese a no haber superado las pruebas de rigor. Una posible disputa legal se asoma en Matute.
El reciente intento de fichaje del argentino Brian Farioli ha encendido las alarmas en Alianza Lima. Luego de no superar los exámenes médicos requeridos para su incorporación, el futbolista ha manifestado su intención de demandar al club ante la FIFA si no es contratado.
Según reveló el periodista Marcello Merizalde, Farioli sostiene que su estado de salud es óptimo y demanda la firma de un contrato para la temporada 2025. “El volante ha dado un plazo de cinco días, hasta el próximo miércoles 8 de enero, para formalizar su vínculo con el club. De lo contrario, procederá con acciones legales por daños y perjuicios”, afirmó el comunicador.
No obstante, trascendió que Farioli no cuenta con un contrato firmado con el equipo blanquiazul, sino únicamente una “carta de intención”, un documento que establece que la incorporación queda supeditada a la aprobación de los exámenes médicos.
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Ante esta situación, el área legal de Alianza Lima ya está trabajando para evitar cualquier contingencia que pudiera perjudicar al club. Esta medida busca evitar un caso similar al ocurrido con el entrenador argentino Cristian Díaz, quien en el pasado demandó al equipo íntimo en una disputa que dejó una huella en la institución.
El director deportivo del club, Franco Navarro, ofrecerá esta tarde una conferencia de prensa en el estadio Alejandro Villanueva para abordar este y otros temas relacionados con la actualidad del equipo. Por ahora, los hinchas y la directiva esperan que el incidente no derive en un problema legal prolongado que afecte los planes del club para la próxima temporada.
Con la pretemporada ya en marcha, este episodio representa un reto adicional para el club, que busca concentrarse en sus objetivos deportivos y evitar distracciones legales en el camino. La afición blanquiazul estará atenta a los próximos días, donde se definirá si este incidente queda como un malentendido o se convierte en un conflicto mayor para la institución.
