La vicepresidenta económica, Nadia Calviño, considera que las reglas tienen que garantizar que pueden tener una senda de responsabilidad fiscal que sea compatible con el crecimiento económico
La vicepresidenta de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, se ha mostrado satisfecha con la propuesta que la Comisión Europea que se presentará el próximo miércoles para reformar las normas europeas de disciplina fiscal, es decir, el Pacto Europeo de Estabilidad y Crecimiento. «Las reglas tienen que garantizar que podemos tener una senda de responsabilidad fiscal que sea compatible con el crecimiento económico, la creación de empleo y la inversiones de futuro», afirmó la ministra este lunes antes de la reunión del Eurogrupo.
Según adelantó el Diario EL PAÍS, la Comisión planteará diseñar, junto con los países afectados, planes fiscales de cuatro años, que pueden extenderse hasta siete, si se asumen reformas e inversión. Fuentes comunicarias en declaraciones a la cabecera española, aseguran que desde Bruselas se planteará límites de gasto nacional o imposición de sanciones más reducidas que las actuales, pero con coste reputacional en los mercados, lo que repercutiría de forma negativa en la prima de riesgo.
El comisario europeo de Economía, Paolo Gentiloni, ya adelantó en septiembre que los Gobiernos podrían elaborar planes multianuales y recibir más flexibilidad si se comprometen a hacer reformas o inversiones, teniendo en cuenta la experiencia de la negociación de los planes de recuperación del fondo Next Generation.
Las normas actuales obligan a los Gobiernos a mantener la deuda pública por debajo del 60% del PIB -España se encuentra en el 116,1%, afirma el INE– y un déficit inferior al 3% -2,27% del PIB en el caso de España según el dato de junio del INE- y exijen hacer ajustes si no se cumple. A raíz de la pandemia se congelaron para dar más margen de maniobra a los países a la hora de responder a la crisis y permanecerán suspendidas, en principio, hasta finales de 2023 debido a la guerra en Ucrania.