El camote gracias a su gran contenido en antioxidantes es un alimento necesario en la dieta de una persona que busca tener una piel sana.
El nutricionista Álvaro Vargas explicó por qué es bueno comer camote:
«Gracias al tocoferol resulta muy útil para el cuidado de la piel, teniendo un efecto hidratante favoreciendo la cicatrización, previniendo la dermatitis y la psoriasis», indicó.
La presencia de antiocianinas ayuda a reducir el colesterol malo protegiendo la salud cardiovascular, sus polifenoles ayudan combatir la artritis y la artrosis, y sus flavonoides son benéficas para la concentración en el estudio, ayudan a mejorar la memoria y proteger las neuronas.
MORADO
En México en los días cercanos al Día de Muertos, se prepara un dulce en forma de papilla con el camote blanco y amarillo; mientras que el morado es reservado para lucirse en las ofrendas de esta mística fecha.
Este último, es un alimento con alto contenido nutricional, cuyos compuestos ejercen una acción terapéutica por lo que por sus propiedades son llamadas nutracéuticas.
Esta variedad de camote adquiere el color morado, debido a unos pigmentos naturales denominados antocianinas, encargadas de dotar a las frutas y verduras de una gama que va del rojo al azul y tornarlos violetas.
Esta raíz morada es originaria del país, especialmente de la Sierra Norte de Puebla, la Sierra Zongolica de Veracruz, Jalisco, Guanajuato y del estado de México; contiene una buena cantidad de antioxidantes y colorantes naturales que podemos aprovechar todo el año.
Además de la raíz, las hojas y flores (considerados como quelites) del camote morado, también se pueden comer. Además, ayuda a pigmentar aderezos, postres, bebidas y alimentos industrializados; es rico en almidón, adecuado para hacer harinas y bebidas fermentadas.
Este tubérculo tiene carbohidratos y proteínas, algunos lípidos y vitaminas, así como minerales. Posee compuestos bioactivos como ácidos clorogénicos, que combaten el estrés oxidativo, es decir, funciona como antioxidante.
DIABETES
Sus triterpenos, cumarinas y alcaloides, son responsables de proteger y prevenir enfermedades a largo plazo si su ingesta es frecuente; asimismo previenen las enfermedades cardiovasculares, permiten controlar la diabetes y recuperar la memoria a corto plazo.
Es uno de los elementos de la dieta tradicional de Okinawa (Japón), donde la población que la consume alcanza un promedio de vida de 87 años, de las más longevas del mundo y con óptima calidad de salud.
Se recomienda consumirlo como verdura o en dulce, para no disminuir sus altas propiedades nutricionales.