El Ministro marroquí de Asuntos Exteriores, Cooperación Africana y Marroquíes Residentes en el Extranjero, Nasser Bourita, afirmó en diferentes medios internacionales, que la decisión estadounidense de reconocer la plena soberanía de Marruecos sobre el Sáhara inaugura “un impulso reforzado en favor de una solución política realista y duradera basada en el compromiso en el marco de la autonomía”.
El canciller marroquí aseguró que esta decisión de los Estados Unidos de reconocer la soberanía plena y entera de Marruecos sobre sus Provincias del Sur y de afirmar un apoyo inequívoco a la iniciativa marroquí de autonomía ha creado la sorpresa a algunos y ha confortado a muchos otros, pero también hizo correr mucha tinta e hizo que algunos se preocuparan.
Por ello, el alto responsable marroquí explicó que el peso de esta decisión debe leerse tomando en cuenta que su autor es una potencia mundial, miembro permanente del Consejo de Seguridad y un aliado estratégico de Marruecos, con el que se han construido excelentes relaciones bilaterales a lo largo de los últimos 20 años, bajo el liderazgo del Rey Mohammed VI.
Para aquellos que piensan que el nuevo mandatario estadunidense Joe Biden cambiará o revisará esta decisión que marca un punto de inflexión en el diferendo regional sobre el Sahara, el Canciller Bourita les reveló que estas excelentes relaciones, enraizadas en la historia y orientadas hacia el futuro, se han consolidado a lo largo de las diferentes administraciones estadounidenses y que así seguirán.
Paralelamente, el responsable marroquí les invitó a reflexionar sobre los alcances de esta decisión que, según él, debe medirse, por la oportunidad que ofrece de encontrar una solución a este diferendo artificial, que ha durado demasiado tiempo, para acercar toda una región altamente estratégica a la estabilidad y la seguridad duraderas.
Sin embargo, “el frente polisario no esperó la decisión estadounidense para anunciar su reiterada violación del acuerdo de alto el fuego firmado en 1991, y para llevar a cabo hostigamientos y provocaciones insignificantes”, denunció el Ministro.
En su reflexión sobre el estado actual del diferendo regional sobre el Sahara, el canciller marroquí subrayó que hay dos visiones opuestas.
Por un lado, explica Nasser Bourita, existe la visión del Reino de Marruecos conducida por el Rey Mohammed VI que aspira a lograr un futuro mejor, a través del lanzamiento de enormes inversiones en el Sáhara marroquí con un presupuesto de más de 7 mil millones de dólares y cuyo objetivo es no dejar a la población rehén de un camino político marcado por el estancamiento.
Y que, por otro lado, hay otra visión que apuesta por el estancamiento, el statu quo e incluso la descomposición, impidiendo así la integración económica regional, amenazando la seguridad en una región volátil que se enfrenta a muchos retos y haciendo caso omiso a las consecuencias humanitarias que genera este diferendo y al bienestar de los pueblos.
Es en base a todos estos detalles, que el Canciller Nasser Bourita llamó a apreciar la dimensión estructurante de la decisión estadounidense que representa un momentum reforzado en favor de una solución política, realista y duradera basada en el compromiso, en el marco de la Autonomía en la que la población del Sáhara marroquí puede gestionar sus asuntos políticos, económicos y sociales, a través de los órganos legislativos, ejecutivo y judicial regionales.
Además, el alto responsable marroquí aclaró que la Proclamación Presidencial de la Administración Trump es la culminación de un proceso de larga data y que todas las administraciones sucesivas (Clinton, Bush, Obama) han apoyado la autonomía como solución al diferendo regional sobre el Sáhara.
El Canciller no omitió recordar a los que les sorprende la decisión histórica de EEUU y su apoyo a su integridad territorial, que esta superpotencia pone a disposición de Marruecos y desde 2015, una línea financiera en beneficio de las provincias del Sáhara marroquí. De igual modo, les recordó también los acuerdos comerciales firmados entre Marruecos y la Unión Europea que se aplican a las Provincias del Sur de Marruecos.
A los que dicen que la Proclamación estadounidense va en contra del proceso llevado a cabo por Naciones Unidas, el Canciller les aclaró que la decisión soberana de los EEUU está en perfecta consonancia con la evolución de esta cuestión en la ONU, recordándoles que las declaraciones de varios ex enviados del SG han insistido en que la «independencia del Sáhara» no es una opción realista y que en las últimas 17 resoluciones del Consejo de Seguridad, se consagró una doctrina clara que pide una «solución política realista, pragmática y duradera», al tiempo que todas han marcado la preeminencia de los esfuerzos serios y creíbles de Marruecos para sacar esta cuestión del estancamiento.
En este sentido, el Canciller Bourita aseguró que Marruecos se mantiene apegado al proceso político llevado a cabo bajo los auspicios de las Naciones Unidas, sobre la base de parámetros claros y con la implicación de las verdaderas partes del conflicto regional.
Finalmente, el jefe de la diplomacia marroquí destacó que el proceso político no es un fin en sí mismo, sino un camino y un medio para llegar a una solución definitiva de este conflicto que ha durado demasiado, dejando claro que las partes que creen que contrarían a Marruecos al oponerse a su iniciativa de autonomía no hacen más que servir a un estancamiento y se oponen a la única promesa de una solución sin vencedores ni vencidos, y que goza de un apoyo internacional cada vez más fuerte.
