Gran parte del vestuario considera que la salida del portugués sería lo mejor para el equipo
La derrota por 2 a 1 ante Brighton en Old Trafford por la primera fecha de la Premier League destapó la crisis dentro del vestuario del Manchester United. Según informa el diario The Sun, gran parte del plantel ya no soporta las actitudes de Cristiano Ronaldo y verían con buenos ojos su salida de la institución.
“Hartos. Los jugadores del Manchester United están cada vez más molestos por las payasadas de Cristiano Ronaldo”, con esas palabras inició su relato el mencionado medio británico. Un grupo numeroso de futbolistas de los Diablos Rojos creen conveniente que CR7 se marche.
El diario inglés se hace eco de una fuente que sostuvo que “Realmente está empezando a molestar a muchos jugadores ahora. Él tiene sus aliados en el campamento, pero muchos están hartos de cómo está haciendo las cosas”.
Todo comenzó la pasada temporada, cuando Manchester United finalizó en la sexta colocación, lo que lo dejó fuera de los puestos de clasificación a la Champions League (sellaron su boleto a la Europa League). Acumularon un total de 58 puntos, 13 menos que Tottenham, último en acceder a ese lugar de privilegio. Además quedó a 35 unidades del campeón Manchester City.
El portugués considera que había un “pacto de caballeros” con los dirigentes, quienes le permitirían una fácil salida en caso de no disputar la Liga de Campeones. Su agente, Jorge Mendes, se reunió con el presidente ejecutivo Richard Arnold para que le ponga un precio a CR7, ya que asegura que cuenta con un acuerdo con una institución, cuyo nombre no trascendió. Sin embargo, los Glazer, propietarios del United, se mostraron inflexibles y no quieren saber nada con la venta de su estrella. CR7 tiene contrato vigente con los ingleses hasta junio del 2023.
Ante este escenario, Cristiano Ronaldo se ausentó de la gira de pretemporada alegando “motivos familiares”. Luego disputó unos minutos en el amistoso ante Rayo Vallecano y se fue solo antes del final, lo que despertó el enojo del director técnico Erik Ten Han, que calificó su actitud como “inaceptable”.
El portugués, en su regreso al United, disputó un total de 38 partidos, en los que aportó 24 goles (seis fueron en la Champions League y culminó como tercer máximo artillero en la Premier League) y brindó tres asistencias.