Subdirector de La Razón
“Tranquilo, compadre. Tú ya sabes cómo es la nuez. Ya qué más seguro. ¿Con quién acabas de estar? Tú asegura lo otro más bien” habría dicho el entonces ministro de Transportes, Bruno Giuffra, al congresista Moisés Mamani, en las supuestas negociaciones para evitar la vacancia presidencial de Pedro Pablo Kuczynski.
Y recogiendo parte de estas expresiones lanzamos una pregunta suelta al Gobierno, Congreso y Ministerio Público: ¿Cómo es la nuez en la fuga del juez César Hinostroza a España?
Si bien la renuncia del ministro de Interior, Mauro Medina, es una muestra que el Poder Ejecutivo asumió su responsabilidad política en la fuga del magistrado que ya tenía impedimento de salida del país. Sin embargo, y en esto coincido con el presidente Martín Vizcarra, el Congreso, a través de su presidente Daniel Salaverry, y el Ministerio Público, a la cabeza de Pedro Chávarry, deben aclarar su participación en ese entuerto que tiene ribetes de escándalo.
Está claro que el Parlamento Nacional no tiene responsabilidad directa en la fuga, sin embargo, la Mesa Directiva debe hacer un mea culpa por el retraso en el trámite de la aprobación de la acusación constitucional de Hinostroza, no puede echarles la culpa a funcionarios de segundo nivel.
Del mismo modo, el Ministerio Público debe aclarar por qué demoró en solicitar la orden de detención, más aún que la resolución de destitución de Hinostroza Pariachi fue publicada en el diario oficial El Peruano el 6 de octubre, es decir no hizo nada en 10 días.
El único que tomó en serio este caso fue el Ministerio de Relaciones Exteriores, que después de la destitución del tremendo juez le decomisó su pasaporte diplomático, y el resto sólo miró al costado. Un verdadero papelón.
Por lo pronto, el gobierno español ha confirmado que Hinostroza ha solicitado asilo político a la Brigada de Extranjería de la Policía Nacional en Madrid, después de haberse fugado para reunirse en la capital española con su esposa.
De momento, y hasta que no se resuelva el expediente y se decida si se acepta tramitar su solicitud, César Hinostroza no podrá ser entregado al Perú.
Hay que hilar fino en este tema, en mi humilde opinión el negar la salida del país a su hija, permite al juez corrupto fundamentar una presunta persecución política. Veremos en que termina este entuerto.
